El Santiago Bernabéu marcó un antes y un después en la historia de los estadios con la implantación del Hipogeo, un sistema de césped retráctil subterráneo desarrollado por Sener. Esta obra de ingeniería, concebida para proteger el terreno de juego y permitir la organización de eventos multitudinarios, situó al Madrid como pionero mundial. Las problemáticas que han tenido a la hora de celebrarlos es otro tema. El Hipogeo, sin embargo, estuvo sujeto a una cláusula de exclusividad que impedía a Sener comercializar la tecnología en Europa durante los siguientes 30 años, limitando su expansión y creación de nuevos mercados.

Florentino Pérez, presidente del club, lo recordó con orgullo en la Asamblea del 2024: “Podría decir que esto del Hipogeo es un invento mío… y lo es”. La innovación permite retirar el césped y guardarlo en grandes bandejas subterráneas, con sistemas de riego, luz y temperatura que conservan la hierba. Este mecanismo ha transformado el Bernabéu en un estadio multifuncional, capaz de combinar partidos y eventos con una rapidez sin precedentes, estableciendo un nuevo modelo de gestión de infraestructuras deportivas. Eso sí, el club ha tenido problemas para realizar otros eventos, no por el césped, sino por la insonorización del estadio

Epigea, un funcionamiento más barato y sin exclusividad

Ahora, más de un año después, Sener ha presentado Epigea, una nueva tecnología patentada que permite proteger el césped sin desplazarlo y, al mismo tiempo, esquivar la cláusula de exclusividad firmada con el Real Madrid. Esta solución, más sencilla y económica que el Hipogeo, utiliza cubiertas móviles que se despliegan sobre el campo o se retiran detrás de las gradas, manteniendo el césped en su lugar y permitiendo una protección integral de todas las zonas. Así, cualquier club podrá acceder a esta innovación sin restricciones legales derivadas del contrato del Bernabéu.

Según explica Sener, el funcionamiento de Epigea garantiza que el césped no sufra desgaste, reduce costes de mantenimiento y facilita la transformación del estadio para acoger conciertos, espectáculos culturales o eventos corporativos en pocas horas. El sistema es modular y se adapta tanto a estadios existentes como de nueva construcción, integrándose discretamente y completamente con la arquitectura, sin afectar la visibilidad ni la experiencia de los espectadores, aseguran. Esta flexibilidad multiplica las horas de uso de un estadio de manera exponencial, pasando de pocas decenas de horas anuales a más de 8.000, convirtiendo los recintos en infraestructuras activas los 365 días del año.

Sener Gespa Epigea
La nueva tecnología de Sener, llamada Epigea

Epigea, además, abre la puerta a un nuevo modelo de negocio. Los clubes podrán aumentar ingresos sin depender de grandes eventos, gracias a la protección del césped y la posibilidad de celebrar eventos parciales. Si el Hipogeo catapultó al Bernabéu como icono mundial, Epigea podría replicar esta revolución en otros estadios europeos e internacionales, sorteando las limitaciones legales que hasta ahora habían bloqueado su expansión.