Agustí Benedito i Benet (Barcelona, 1964) es empresario, excandidato a las elecciones del Barça del 2010 y 2016, y miembro de las comisiones deportiva y social entre 2003 y 2009. Sumando un total de 3.386 votos en las últimas elecciones para presidir el club blaugrana, acabó siendo la tercera fuerza por detrás de Josep Maria Bartomeu y Joan Laporta. En las últimas horas ha anunciado la propuesta de una moción de censura a la directiva del Barça.
¿Por qué ha anunciado ahora la moción de censura?
La situación de gravedad institucional se produce en los últimos doce o trece meses. Específicamente cuando en el mes de junio pasado se firma aquel pacto con la fiscalía que comporta esta posición tan delicada penalmente con la condena aceptada de un doble delito fiscal hecho para que se salvasen Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu. Pero es que ahora recientemente hemos tenido la otra noticia que es la detención y el ingreso de Rosell, que de nuevo te lleva al porqué de la detención y con la vinculación entre el FIFA Gate, Qatar y el pago de comisiones. Y volvemos al pacto Qatar-Barça y todo el daño que nos ha hecho esta alianza. Todo se explica con las relaciones económicas de Rosell, Bartomeu y Javier Faus.
Más allá de la moción de censura, ¿hubiera preferido la dimisión de la junta?
Por encima de todo. Hace una semana les pedí la dimisión inmediata y hace un año con aquel pacto vergonzante también. Es evidente que muchos socios del Barça que están de acuerdo que los responsables de la situación, con los intereses cruzados personales, no serán quienes nos harán salir. Y por eso los status del Barça habilitan este instrumento difícil pero que finalmente comporta la dimisión de la junta.
¿Cuáles serían los timings?
Se tiene que saber que los requisitos después de la última reforma en el 2013 es de un 15% de la masa social del club y requiere unas 16.500 firmas a recoger en 14 días hábiles. Por eso hemos pensado que la única manera de atacarlo con posibilidades es que previamente al inicio de los 14 días ya tengas unos cuantos millares de socios que estén esperando para firmar.
¿Cuántos días se tardará en tener esta masa social mínima?
No pueden ser demasiados días ni demasiadas semanas. Veremos cómo va el ritmo de adhesiones y tan pronto como tenga una cantidad mínima que te permita pensar que el voto de censura es posible, activamos, empezamos y presento el escrito al Barça.
Estoy seguro de que será en un plazo corto de tiempo
¿Tendría que ser más pronto que tarde?
Creo que es bueno que sea cuando antes mejor. Al final si la gente no tiene interés, no pasa nada, lo tenemos que admitir. De hecho, estoy seguro de que será en un plazo corto de tiempo.
¿Cómo tiene previsto hacer para recoger las firmas?
Tendremos que tener puntos de recogida de firmas, una capacidad logística importante porque tendremos miles de personas que esperan que les vayamos a recoger la firma y obliga a una infraestructura concreta. Lo tendremos resuelto.
¿Ve necesario el apoyo de Joan Laporta y Toni Freixa?
Cuantos más apoyos tengamos mejor, pero tenemos que coincidir en un punto, la necesidad de que esta junta directiva acabe dimitiendo. El apoyo de Laporta seguro, porque es el segundo candidato más votado en las pasadas elecciones y fue presidente del Barça durante siete años. Y de Freixa, del Manifiest Blaugrana y de todos los socios que sean posibles.
¿Hubiera sido mejor hacer el anuncio de la moción de censura junto con Laporta y Freixa?
Creo que sí. Tanto a Laporta como a Freixa les llamé antes de hacer la convocatoria de prensa, les informé y se dieron por enterados. En ningún momento hablamos de nada más. Pero hubiera sido una iniciativa que le hubiera dado más impulso.
Hay gente que también es muy sensible por el barcelonismo y entiende la situación
¿Crees que los últimos hechos judiciales y los relacionados con Qatar pueden hacer cambiar de parecer a los votantes de Bartomeu?
Estoy seguro. Hubo gente que acabó votando a Bartomeu en el último momento y dudándolo porque quizás no querían que ganara Laporta, por ejemplo. Hay gente que también es muy sensible por el barcelonismo y entiende la situación.
¿Ve excesivo el 15% del apoyo de los socios para hacer la moción de censura?
Es verdad que está pensado para todas las entidades deportivas del país, es cosa de la ley catalana y quizás el Barça es excepcional. Duele pedir que la ley haga una excepción en este caso, pero este número tan importante de socios es muy alto.
¿Cree que es viable el éxito contra un presidente que tuvo un 54,63% del apoyo en las elecciones?
En las dos mociones de censura que se hicieron (1998 a Josep Lluís Nuñez y 2008 a Joan Laporta) se superaron el 5%, que era lo que se pedía y ninguna de ellas superó los dos tercios posteriores (66% como requisitos de los votos de la moción para aprobarla). Es un número tan alto, si consigues el 15%, que puedes presumir y proyectar que el apoyo electoral quizás lo doblarás. La propia dificultad del requisito hace que de conseguirse es muy probable que acabes ganando la votación.
¿Qué piensa de la sentencia final de la acción de responsabilidad?
Aquello fue un error gravísimo de la junta de Rosell, condicionar en aquella asamblea de compromisarios y de la manera que lo hicieron para que el voto final fuera el que más les convenía. A partir de aquí todo ha sido un error detrás de otro. Soy contrario a exigir responsabilidades por resultados económicos; otra cosa es la mala gestión.
¿Se ha visto perjudicada la credibilidad de la junta de Bartomeu?
La junta de Bartomeu ya no tiene credibilidad. En estos momentos cualquier cosa que puedan pensar ya no queda porque la credibilidad está agotada. Estamos hablando de unos niveles... he querido explicar la trascendencia de la decisión que perdieron el junio pasado, de las consecuencias que tiene la detención y el ingreso de Rosell y todo lo que vamos sabiendo.
¿Qué piensa de la paz social?
Primero tenemos que pensar qué quiere decir la paz social. Soy un defensor acérrimo de los ismos. Pienso que es la manera como los culés tenemos de vivir nuestro barcelonismo y lo manifestamos de esta manera. Aquí nos sentimos como propio el club. Pero todo hasta un extremo porque los últimos años hemos pasado líneas que han hecho daño al Barça.
¿Cómo afecta al Barça el encarcelamiento de Rosell?
Le afecta muchísimo. Es una de las razones que confirman la peor crisis institucional del Barça. Estamos abriendo los informativos de todo el mundo con la noticia de que el expresidente del Barça está en la prisión por un tema que afecta al Barça: Qatar. Y lo llevamos en el pecho de la camiseta sólo por los intereses económicos que han tenido Rosell, Bartomeu y Faus. Detrás de este interés económico han puesto en juego la imagen del Barça y eso es imperdonable.
Con Qatar no tendríamos que haber entrado nunca
¿Cómo ve la vinculación actual del Barça y Qatar?
Con Qatar no tendríamos que haber entrado nunca. Pero reitero que es difícil que eso suceda cuando ellos tienen intereses económicos. ¿Desde una óptica Barça, qué hemos ganado con Qatar? Nada. Vinculamos nuestra historia, nuestros valores, nuestra presencia en el mundo al lado de un régimen como este que financia el terrorismo yihadista...
¿Bartomeu tiene alguna vinculación con Qatar?
Bartomeu, Rosell y Faus hacen el tridente de Qatar. Los tres tienen intereses económicos con Qatar. Sus empresas tienen relación con Qatar y creo que es una mala noticia para el Barça.
¿Cómo vería que Bartomeu renunciara a la presidencia?
A todos ellos los veo cómplices. En la vida tú asumes tu responsabilidad cuando formas parte de un colectivo. Todos aquellos que han estado a favor de continuar con esta relación se tienen que hacer responsables. La moción de censura se pedirá para toda la junta directiva.
El Barça ha querido ser transparente enviando a la Policía Judicial de Barcelona los contratos.
Ejercicio de transparencia no han tenido. Es de cara a la galería. ¿Quién pretende que quede reflejado en un contrato alguna cosa irregular? Uno puede ser ladrón, pero no es tonto del todo. No tengo claro que la relación se acabe este 30 de junio y me gustaría que me lo confirmaran. No sé si siguen con Qatar Airways.
¿Qué piensa de la gestión económica de esta junta?
Es un desastre. Han sido capaces de aumentar el coste de la plantilla del primer equipo de fútbol de 180 millones de euros, al final del mandato de Laporta en el 2010, y ahora van por 500. Esta junta engatusó a todo el mundo diciendo que haríamos una inversión para el Espacio Barça que tenía que empezar el verano del 2017 y todavía es hora que sepamos ni siquiera cuándo tiene que empezar.
¿Hay crisis deportiva?
Cuando el Real Madrid, tu rival histórico, gana tres Champions hace mucho daño y me parece que que se puede decir la actuación del equipo las dos últimas temporadas, como venimos de una excelencia, siempre saldrás perdiendo. Aquello era muy difícil. Gracias a Dios seguimos teniendo a Leo Messi, que es quien explica los resultados.
Yo no soy demasiado de tridente
¿Usted es más del tridente o de los centrocampistas?
Yo no soy demasiado de tridente, porque si hablas de tridente igualas a tres jugadores y yo creo que hay Messi y dos más. Pero el Barça se ha definido estos últimos años por el medio del campo. Nos ha dado la mejor etapa de títulos al Barça y su contribución a la selección española les ha dado dos Copas de Europa y un Mundial. El juego de posición es muy importante en el Barça. Y por el hecho de perder piezas clave en medio del campo, quizás por aquí ha llegado la bajada de juego.
¿Y qué piensa del fútbol base?
El modelo del Barça se sustentaba precisamente en que cada año te subía gente formada con una manera de hacer del fútbol base y tampoco existe. La junta actual ha sido la responsable. Han ido deteriorando una herencia que recibieron muy positiva y en su mandato le han ido bajando el nivel competitivo. Es un recurso que necesitamos, que nos define el equipo de fútbol y nos define como club.
¿El Barça se puede permitir el año que ha hecho el baloncesto?
Donde tenemos seguro una crisis deportiva está en la sección de baloncesto. Es especialmente chocante cuando Albert Soler, uno de los principales responsables del baloncesto, justificó la marcha de Xavi Pascual y Chichi Creus quiso hablar de un cambio de modelo. La realidad es que todo no tenía ningún sentido.
Estamos con un problema de diseño de secciones
Este año ha sido el segundo sin títulos europeos en secciones profesionales.
Estamos con un problema de diseño de secciones que no son capaces de fijarse con bastante intensidad y que no pueden salir adelante. Nosotros nos definimos "Més que un club" en buena medida con las cuatro secciones profesionales y las otras no profesionales.
¿Cree que los directivos responsables de cada sección son los adecuados?
En las secciones tiene que haber gente que venga de cada disciplina deportiva. Es muy importante entender que cada disciplina tiene su lógica y su dinámica.
¿Y los problemas de la junta quedan reflejados en todas las bases del club?
Han sido incapaces. Han hecho un déficit de gestión clarísimo en el caso institucional, la política económica y también en la deportiva.