Pese a la eliminación de la Champions League, no hay duda de que este Barça ha enamorado a media Europa. Existe la convicción generalizada de que más pronto que tarde, el equipo de Hansi Flick conquistará la ‘Orejuda’. No obstante, también es una realidad que, para ello, será necesario contar con una defensa más contundente. Este Barça encaja demasiados goles. 16 goles en los últimos siete partidos oficiales. La fragilidad defensiva se ha convertido en el talón de Aquiles del conjunto azulgrana.

Tres goles contra el Borussia Dortmund en el Signal Iduna Park, 3 ante el Celta, 2 en la final de Copa frente al Real Madrid, 2 en Valladolid y 7 contra el Inter de Milán. Por suerte, solo los últimos han supuesto una caída importante. Además, muchos de ellos han llegado a balón parado, ya sea por un lanzamiento de falta o de penalti, o por centros de córner.

Barça Inter gol EFE
Barça Inter gol EFE

Reforzar la defensa es un objetivo prioritario

Ante este panorama, la dirección deportiva ha tomado una decisión contundente: invertir 220 millones de euros en tres fichajes prioritarios para satisfacer las exigencias del técnico alemán. Las áreas a reforzar están claras: lateral derecho, central de garantías para relevar a los titulares y portero. Si bien Marc-André ter Stegen sigue siendo indiscutible, en el club creen que necesita una competencia real, algo que no ofrecen Iñaki PeñaWojciech Szczesny. Se busca un perfil joven pero experimentado que pueda presionar al alemán y garantizar seguridad cuando este no esté disponible. El objetivo no es solo competir en Europa, sino construir un bloque sólido que devuelva al Barça al trono continental.

Para lograr esa inversión, el club prepara una reestructuración de la plantilla. Ronald Araújo, Frenkie de Jong, Ansu Fati y Héctor Fort son algunos de los nombres que se manejan en la lista de posibles salidas. Las previsiones apuntan a ingresos superiores a los 200 millones, a los que hay que sumar otros 8 millones por venta de Jean-Claire Todibo del Niza al West Ham, que servirán como base para ejecutar la revolución planificada por la cúpula directiva.

Ronald Araujo efectua una passada durant l'Inter - Barça de la Champions League / Foto: Europa Press
Ronald Araujo / Foto: Europa Press

Con este plan, el Barça apuesta por el futuro inmediato, sabiendo que con Flick al mando y un equipo más equilibrado, la Champions puede dejar de ser una promesa para convertirse en realidad. La afición pide títulos y el club ha decidido responder con ambición e inversión.