El Gran Premio de Miami se ha convertido en una fuente de frustración para Fernando Alonso. A pesar de las promesas lanzadas desde el seno de Aston Martin, el piloto asturiano no verá en su monoplaza las mejoras tan esperadas para esta fase de la temporada. Semanas atrás, desde la escudería británica se filtró que el AMR25 recibiría una actualización importantes, algo que ilusionó al entorno del bicampeón del mundo. Sin embargo, el resultado ha sido otra decepción más en una campaña marcada por las promesas incumplidas.

El discurso oficial hablaba de piezas nuevas, posibles evoluciones aerodinámicas y de una apuesta por dar a Alonso un coche con el que poder aspirar, al menos, a pelear por un podio ocasional. Nada más lejos de la realidad. En Miami, solo se han incorporado elementos mínimos, adaptaciones pensadas exclusivamente para el trazado urbano, como ajustes en el alerón delantero o los conductos de freno. En definitiva, modificaciones irrelevantes que no mejoran el rendimiento global del coche.

Fernando Alonso al GP d'Austràlia / Font: Europa Press
Fernando Alonso / Font: Europa Press

Las mejoras de Aston Martin para el AMR25 no llegan

El propio Pedro de la Rosa, embajador del equipo y ex piloto de F1, lo admitía: “Lo siento por Fernando, pero no tenemos nada mejor para darle”. Las declaraciones del español reflejan el ambiente de frustración interna que se respira en la escudería. A pesar del trabajo incansable de más de 900 empleados, la realidad es que el equipo no ha logrado recuperar el nivel competitivo perdido desde el tramo final de la temporada pasada.

Fernando Alonso, acostumbrado a sacar el máximo de coches por debajo del nivel de la élite, empieza a mostrar signos de inconformismo. A sus 42 años, sigue siendo uno de los pilotos más regulares de la parrilla, pero se ve atrapado en un proyecto que parece haber perdido el rumbo. Mientras tanto, Aston Martin centra gran parte de sus esfuerzos en el desarrollo del coche de 2026, dejando al AMR25 de la mano de Dios.

El director técnico de la escudería británica, Andy Cowell, trató de calmar las aguas, apuntando a que “se están desarrollando tecnologías que beneficiarán a ambos proyectos, el actual y el futuro”. Una explicación que suena más a excusa que a otra cosa.

Fernando Alonso China EFE
Fernando Alonso EFE

Fernando Alonso se siente engañado por los responsables de Aston Martin

Mientras tanto, los rivales directos como McLaren, Mercedes o Ferrari aceleran en sus programas de desarrollo. La diferencia en pista aumenta, dejando el octavo o noveno puesto como la máxima aspiración de Aston Martin.

El sentimiento en el entorno de Alonso es claro: se sienten engañados. La falta de piezas, la falta de estrategia clara y la sensación de estancamiento han sembrado dudas sobre el verdadero compromiso del equipo con su piloto estrella. Y en Miami, otra carrera sin soluciones ha puesto en evidencia que los problemas habituales. El proyecto Alonso-Aston Martin se desmorona.