Los goles de Marco Asensio resuenan con fuerza en el Santiago Bernabéu. Y también en el Camp Nou. El Barça dejó escapar a uno de los futbolistas que marcará la próxima década en Europa para no entenderse con el Mallorca a la hora de pagar 4,5 millones de euros. Los baleares, en problemas económicos, querían cobrar el dinero en un único pago. Y el Barça quería llegar a través de variables. Un error histórico que acabó con Asensio vistiendo de blanco y escuchando la famosa frase de Florentino Pérez: "Ha nacido para jugar en el Real Madrid".

Arnaiz, a golpe de talonario

El Barça, escarmentado por la pérdida traumática de Asensio, no quiso tropezar por segunda vez con la misma piedra. Y fichó a Jose Manuel Arnaiz Díaz (Toledo, 1995) en los últimos días del pasado mercado de fichajes. 3,4 millones de euros que pueden llegar hasta los 8 si el futbolista sube al primer equipo o se convierte en internacional. Arnaiz dejaba el Valladolid para ser uno de los referentes del Barça B.

"Es un jugador que estuve siguiendo mucho y el club ha hecho un esfuerzo para su incorporación. Creo que es un jugador llamado a ser importante en el club, incluso en el primer equipo. Es mucho rápido, con capacidad de uno contra uno, letal, goleador y combinativo", dijo su entrenador, Gerard López, cuándo se hizo oficial su fichaje.

En Murcia, Arnáiz debutó con los 'grandes' y lo hizo de titular. Además, marcó el tercer gol del partido con una jugada marca de la casa; eliminando rivales y superando al portero con un potente disparo cruzado.

El Barça, dos meses después, se felicita por haber cerrado el fichaje de una de las piezas más preciadas del mercado. Con sólo 22 años, Arnaiz es indiscutible en la banda izquierda del filial, aunque puede jugar en las tres posiciones de ataque. Su verticalidad y calidad técnica lo han llevado a hacer jugadas de videoteca y a contribuir decisivamente al inicio de temporada con cuatro goles.

Otro delantero

Arnaiz se ganó en el Valladolid la oportunidad de soñar con el Camp Nou. La temporada pasada, el delantero sumó 12 goles y 3 asistencias en los 35 partidos que jugó enPucela. Números que atrajeron todas las miradas hacia la Segunda División. La decisión del Barça sirvió para ligar en corto el futuro del hermano mayor de los tres Arnaiz Díaz.

"Mejor imposible, es el mejor debut que se puede soñar. Ya tenía ilusión de jugar, pero no me imaginaba hacerlo de titular. No lo olvidaré nunca", dijo el extremo después del 0-3 contra el Murcia, evidenciando que empieza a gestionar su pánico a los medios de comunicación. Arnaiz convenció a Valverde en el Miniestadi y en la Nueva Condomina, pero sus inicios no fueron fáciles. En el filial del Valladolid, incluso, estuvo a punto de dejarlo todo por un entrenador que lo hacía jugar de lateral e, incluso, de central.

La lesión de Ousmane Dembélé, que lo dejará sin jugar de blaugrana hasta el 2018, le otorga a Arnaiz, el hombre de moda en 'can Barça', la oportunidad de cruzar Arístides Maillol para consolidarse como miembro de pleno derecho de la primera plantilla. La competencia de Arnaiz es feroz, pero también lucha para hacer olvidar el fracaso del club con Asensio, una herida que tardará mucho en cicatrizar.