Antonio Conte ha devuelto al Nápoles a lo más alto del fútbol italiano. Campeones de la Serie A 2024-2025, los del sur de Italia se preparan para un verano de consolidación. Lejos de conformarse, el técnico italiano ya trabaja en refuerzos para un proyecto que buscará competir en Champions con garantías. Y en su lista de prioridades aparece un nombre inesperado: Ferran Torres, delantero del FC Barcelona, quien ha recuperado su mejor versión bajo las órdenes de Hansi Flick.
La temporada del atacante valenciano ha sido su mejor desde que llegó al Barça. Con 10 goles y 6 asistencias en 27 partidos de liga, Ferran ha sido clave en momentos en los que Robert Lewandowski estuvo ausente o mermado físicamente. Flick le ha brindado confianza, minutos y un rol más centrado en el juego asociativo, explotando su movilidad, desmarque y capacidad para atacar espacios. Su rendimiento no ha pasado desapercibido fuera de España.
Conte lo quiere como alternativa ofensiva
Según fuentes próximas al entorno napolitano, Conte ve en Ferran un perfil ideal para su sistema. No tanto como 'nueve' de referencia, sino como segundo punta o extremo que pueda moverse libremente en el último tercio. Su versatilidad, experiencia internacional y edad —24 años— encajan con la política de fichajes del club, que busca futbolistas con margen de crecimiento pero ya contrastados en la élite.
El Barça, por su parte, no cierra la puerta a una posible venta, siempre que la oferta sea interesante. Ferran tiene contrato hasta 2027 y una cláusula alta, pero en el contexto de ajustes financieros y necesidad de ingresos, una cifra cercana a los 30 millones de euros podría activar su salida. En Can Barça valoran su progresión, pero saben que no es intocable.
Ferran, en el escaparate de Europa
Con su notable rendimiento, Ferran ha vuelto a colocarse en el radar de varios clubes europeos. Además del Nápoles, en Alemania y Inglaterra también ha despertado interés, aunque es en Italia donde podría encajar mejor por estilo de juego y exigencias tácticas. Conte valora especialmente su compromiso defensivo, su lectura sin balón y su madurez en situaciones de presión.
Para el Barça, una posible venta representaría una operación estratégica: aliviar masa salarial y abrir espacio a jóvenes que vienen pidiendo paso. Pero todo dependerá del propio Ferran, que ha dejado claro que se siente cómodo en Barcelona y no forzará su salida salvo que el proyecto le seduzca plenamente.
Conte ya ha dado el OK. Falta que el Nápoles decida si hará una ofensiva real. Ferran Torres podría ser uno de los nombres calientes del verano si la operación toma forma en las próximas semanas.