L'Altra Editorial ha presentado, este martes, La mort lenta, la novela de Xavier Mas Craviotto que ha obtenido el 39è Premio Documenta reservado a los autores de menos de 35 años, que convoca la histórica librería Documenta. Se trata de la historia de dos hermanos que están en la universidad y que se tienen que enfrentar a la muerte accidental de sus padres, que les obliga de golpe a asumir, de golpe, responsabilidades. La editora Eugènia Broggi, ha destacado la juventud "casi insultante" no sólo del ganador, sino de otros participantes en el concurso, incluso con una concursante de tan sólo 17 años, que según Broggi, "seguro que hará cosas en el mundo de la literatura". Broggi ha destacado que entre los 21 manuscritos recibidos había gran calidad, y que L'Altra publicará en otoño, también, un original de Maria Climent.

La otra muerte

Sorprende que un autor tan joven sitúe la muerte en el corazón de sus reflexiones, pero Mas Craviotto es contundente: "Es lo único que sabemos, de la vida, que tenemos que morir", y "pensamos demasiado poco en ello". Y su reflexión va más allá de lo que es la simple muerte física, a partir incluso del propio título. La mort lenta, según el autor, hace referencia a todo aquello que no es la muerte física, una muerte "que se causa en un solo momento". Es decir, se refiere a la muerte de las cosas que una persona ha hecho, la muerte del recuerdo, la inexorable desaparición... Un proceso que no se experimenta en un momento, sino que se va produciendo poco a poco... En realidad, los protagonistas de la novela descubrirán, cuando sus padres ya han muerto y ya no pueden hacer nada, que su familia era un fracaso. Mas Craviotto quiere aclarar que La mort lenta habla también del amor, del deseo, de los instintos, de la dependencia y de muchos sentimientos "que se mezclan y se cofunden". Los protagonistas van acumulando tensiones pacientemente hasta que en un momento determinado la situación estalla, "como un géiser". "Cojo la cotidianidad como materia prima", explica el joven autor de Navàs.

El triunfo de una apuesta arriesgada

Pau Vidal, miembro del jurado, ha afirmado que La mort lenta es "un libro con voluntad de riesgo", pero no literatura experimental. Es "un libro con un gran dominio del lenguaje narrativo, tanto en el aspecto argumental como en el formal". Y ha remarcado que muestra una gran madurez con los diálogos, que no son nada impostados y que muestran un gran dominio de la lengua coloquial (el autor reconoce que incluso introduce algunos castellanismos, para dar verosimilitud al texto). Mas Craviotto ha reconocido que se había planteado la redacción de este libro "como un ejercicio literario, un divertimento". "Quería hacer una cosa diferente", alega. Ha explicado que ha dividido los capítulos en tres categorías diferentes, cada una de ellas con su propio registro de escritura. Además, los capítulos no siguen un orden cronológico, y el libro se puede leer siguiendo el orden en que están dispuestos los capítulos en la publicación o cronológicamente. Pero la lectura cambia según cómo se lea. "El libro tiene muchos juegos, porque está voluntariamente descolocado", explica Eric del Moral, de la librería Documenta: "Es como un rompecabezas".

El empuje de un joven

Xavier Mas Craviotto es filólogo. Con sólo 17 años quedó finalista del Premio Literario Jordi Sierra i Fabra. Afirma que "siempre" ha escrito simultáneamente narrativa y poesía. Ha ganado varios premios de relatos y de poemas. Asegura que escribió la obra ganadora del Premio Documenta en tan sólo un verano. Y hace sólo unos días obtuvo el premio de Art Jove Salvador Iborra de poesía con Renills de cavall negre. Sigue escribiendo poesía y está pensando en hacer un libro de relatos sobre la frágil frontera entre el bien y el mal, partiendo de cuentos que ya tiene escritos, pero adelanta que de momento no se dedica a hacer ninguna novela, por falta de tiempo, ya que asegura que para él, "la escritura de una novela es absolutamente absorbente. Si me dedicara a escribir una novela ahora, no haría nada más".