Cuándo Rihanna anunció vía Instagram, y aprovechando para hacer publicitado de su marca de maquillaje, que sería la encargada de hacer el conocido como Halftime Show de la Superbowl de este 2023, mucha gente se sorprendió. No porque Rihanna no sea una superestrella y capacitada para hacer este espectáculo, sino porque desde el 2016 que no saca ningún disco ni da una gira, hecho que convertía este partido de fútbol americano en el esperadísimo retorno de Rihanna. Y la de Barbados ha cumplido las expectativas en un microconcierto de 13 minutos en que ha repasado su carrera, aunque por el camino se ha dejado algunos de sus grandes hits, muy esperados por los fans. Con todo, su ausencia ha quedado camuflada por la barriga de la artista, en que ha aprovechado para lucir un nuevo embarazo, tan solo nueve meses después del nacimiento su primer hijo con el rapero A$AP Rocky.

Solo la elección de la primera canción ya ha sido una sorpresa, ya que los expertos con la materia consideran que el single con que los cantantes empiezan el Halftime Show tiene que cumplir tres requisitos: tiene que ser de sus inicios, tiene que ser reconocible a la primera nota y todo el mundo se la tiene que saber, incluso los abuelos. Así, mucha gente esperaba que por cumplir con estas premisas Rihanna empezaría con Don't Stop The Music, que a pesar de no ser su primera canción, sí que la catapultó a la fama. Esta ni siquiera sonó durante todo el show, como otros grandes temas de la primera etapa de la cantante y que sus fans esperaban poder volver a escucharles en este repaso a su carrera musical como Pon the Replay o Disturbia. Finalmente, su apuesta ha sido Bitch Better Have my Money, uno de los éxitos más "recientes" de Rihanna, que publicó la canción en 2015.

Sin 'Don't Stop the Music', pero con 'Umbrella'

Después de este inicio sí  han sonado canciones más conocidas por el gran público como son Where Have you Been, en la que la de Barbados es luce vocalmente, Only Girl in the World y We found love, todas de principios de la década del 2010. Después de este "mash up" ha sonado Rude Boy y Rihanna ha tenido tiempo también en sus 13 minutos de cantar sus últimos hits, Work y Wild Thoughts. También canciones más desconocidas para|por el público de todo el mundo que estaba pendiente de su espectáculo como Pour it up, All of the Lights (una colaboración que hizo con el siempre polémico Kanye West) y Run This Town.

Con un ejército de bailarines vestidos de blanco y ella toda de rojo marcando su barriga de embarazada, al más puro estilo Beyoncé en los MTV Awards en que anunció que esperaba a su primera hija, Rihanna no se olvidó, eso sí, de dos de sus grandes éxitos. Aunque cosas más extrañas han pasado, a nadie le pasaba por la cabeza que se marchara sin cantar Umbrella, y no lo hizo. Es la canción que le cambió la vida a la cantante y no se la podía dejar por el camino. Aunque el tema que ha escogido para cerrar su show ha sido Diamonds, la gran balada de la cantante, sin contar Stay o Love on the Brain, de su último disco.

Rihanna, sola ante el peligro de la Super Bowl

A pesar de estas ausencias, el retorno de Rihanna ha sido triunfal: en 13 minutos ha sido capaz de volver a los escenarios después de siete años, anunciar su segundo embarazo y hacer publicidad de su marca Fenty Beauty, retocándose en pleno directo el maquillaje. Además, en los últimos años, lo más habitual en los Halftime Shows era que los cantantes no actuaran solamente: en el 2022 cantaron hasta seis raperos en lo que fue un homenaje al hip-hop, y antes de la pandemia, las estrellas fueron Jennifer López y Shakira. Rihanna, sin embargo, tiene bastante con ella sola (y su barriga) como  ya hicieron las otras grandes estrellas norteamericanas del siglo XXI, que ya han tenido la oportunidad de lucirse en un concierto como este: Beyoncé, Lady Gaga o Katy Perry.

Sea como sea, Rihanna ha vuelto. Y lo ha hecho ante la atenta mirada de todo el mundo, ya que pocos espectáculos concentran a más espectadores que este. Además, tal como reflejan los memes que en las últimas horas han inundado Twitter, si quiere, con todas las canciones que no ha cantado, tiene suficientes para repetir el año que viene. Por cierto, los Kansas City Chiefs derrotaron (38-35) en los Philadelphia Eagles y se llevaron su tercer título de la NFL a la final de la Superbowl.