Dos exposiciones glosan la figura de Oleguer Junyent (1876-1956): en el Arxiu Fotogràfico de Barcelona, "Oleguer Junyent, fotògraf. Roda el món i torna al Born"; y al Museo Frederic Marès, "Oleguer Junyent, coleccionista. Roda el món i torna al Born". Los dos museos se han puesto de acuerdo para programar conjuntamente estas exposiciones. La del Arxiu estará abierta hasta el 14 de octubre y la del Marès hasta el 7 de enero. Se ha publicado un catálogo conjunto para las dos exposiciones: Oleguer Junyent, col·leccionista i fotògraf. Roda el món i torna al Born, con textos de Clara Beltrán, Ernest Ortoll, Montse Torres, Josep M. Trullén y Rafel Torrella. Junyent fue, ante todo, escenógrafo, pintor y decorador, y por ello fue amigo de Utrillo, Casas, Nonell, Picasso... Pero se dedicó también al coleccionismo y a la compra y venta de obras de arte. Y, por otra parte, se aficionó a la fotografía, aunque no fue nunca un fotógrafo técnicamente muy bueno.
Oleguer Junyent. © Archivo Fotográfico Barcelona. Foto: Pérez de Rozas.
Del Born en la pintura
Junyent nació en 1876 en el barrio del Born, hijo de un alpargatero. A los 14 años empezó a trabajar con el escenógrafo Fèlix Urgellés y empezó estudios en la Escuela de la Llotja. A los 20 años se incorporó al taller de escenografía del Gran Teatre del Liceu, dirigido por Francesc Soler i Rovirosa. Más tarde iría a Francia y trabajaría como escenógrafo en la Ópera de París; en este periodo entró en contacto con muchos catalanes que residían en la capital francesa: Nonell, Anglada y Camarasa, Picasso... También estuvo en Bayreuth para conocer la escenografía de los festivales de ópera wagnerianos. Al retornar se reincorporó al Liceo, donde hizo muchas escenografías, pero también se dedicó a decorar casas particulares y algunas instituciones. Hizo amistad con Francesc Cambó e incluso hizo una travesía con él, en su yate, por el Adriático, el Jónico y el Egeo, en 1932. Durante los últimos años de su vida se dedicaría, básicamente, a la pintura y al coleccionismo. Murió en 1956.
Sakkara. Pirámide del faraón Djoser. Oleguer Junyent. AFB.
Un viaje especial
En 1908 Oleguer Junyent se marchaba de viaje con su amigo Mariano Recolons. Pasaría 11 meses de país en país y acabaría por dar la vuelta al mundo. Pasaría por Egipto, Yemen, India, Ceilán, Australia, China, Corea, Japón, Canadá, Estados Unidos, Inglaterra y Francia. Un viaje en que Junyent se quedaría fascinado por los dhows del mar Rojo, por los paisajes nevados canadienses, por los bonsais y las geishas japoneses... Oleguer sería un turista privilegiado que visitaría muchos rincones turísticos antes de que se masificaran. Sus fotos reflejan muchas de las atracciones turísticas locales: las pirámides en Egipto, las piras funerarias en el Ganges, la muralla china, las cascadas del Niágara... Sorprende, hoy en día, ver todos estos escenarios prácticamente desiertos. Junyent, que era aficionado a la fotografía, se llevó la cámara y dejó constancia de los sitios y paisajes que vio. No hizo muchas fotografías; en Corea, por ejemplo, sólo hizo cinco, todos a un mismo mercado de pescado. Pero sus imágenes transmiten la fascinación por los lugares que visitaba, alguno de ellos, como los de la India o los de Japón, muy poco conocidos por los catalanes de la época. Además de las fotografías, Junyent hizo algunas acuarelas y numerosos apuntes a lo largo de su viaje.
Viaje hacia Canadá a bordo del Macedonia. Oleguer Junyent. AFB.
Del recuerdo a la exposición
Aquellas fotografías que Junyent se había planteado como un simple recuerdo, acabarían teniendo mucho recorrido. Cuando volvió, Junyent recibió el homenaje de sus amigos, y ante su interés, decidió organizar una exposición en la galería de los Faianç Català. Sería un gran éxito. Al fin sacó dos libros de viajes con sus textos y con fotografías suyas y de otros fotógrafos: Roda el món i torna al Born (1910) y Viaje de un escenógrafo a Egipto (1919). Hace pocos años, los herederos de Junyent cedieron estas fotografías al Arxiu Fotogràfic de Barcelona (AFB) en régimen de comodato. Gracias a eso se ha podido organizar esta exposición, en la que se presenta una colección de 80 de las 370 fotografías realizadas durante el viaje, digitalizadas. Además, se ha preparado un vídeo sobre el viaje de Junyent, y se ha habilitado un dispositivo para ver en tres dimensiones las fotografías, ya que estas fueron hechas con cámaras estereoscópicas sobre cristal de 45 x 107 mm, y permitían tomar imágenes con volumen. Quien no pueda ir al Arxiu Fotogràfic, puede ver la exposición, de forma virtual, a través de la web del AFB.
Winnipeg. Oleguer Junyent. AFB.
El coleccionista
En el mundo de Oleguer Junyent era frecuente dedicarse al mismo tiempo a la creación de arte y a la compra-venta de antigüedades y obras artísticas. Junyent, en el mundo de la escenografía, era discípulo de Francesc Soler i Rovirosa, quien también vendía arte y antigüedades y lo introdujo en esta práctica. Junyent hizo amistad con Frederic Marés, quien se dedicaba a las mismas actividades que él. Y entró en contacto e hizo amistad con algunos coleccionistas de arte como Francesc Cambó o el industrial Lluís Plandiura. De esta forma, la colección de Junyent se constituía y se dispersaba simultáneamente. El artista, tal como compraba, vendía. Ahora el Museo Marés presenta en la exposición Oleguer Junyent, coleccionista, 16 piezas que en algún momento pasaron por sus manos, en su mayoría tallas religiosas (junto con una magnífica "arqueta amatoria", unas cajas de madera que durante el gótico los nobles regalaban a las doncellas cuando se prometían con ellas). Además, la exposición presenta algunas de las acuarelas y fotografías realizadas por Junyent en los viajes que hizo con Cambó a bordo del yate Catalònia.
Acuarela pintada en el yate Catalònia © Colección Armengol Junyent. Foto: Guillem F-H.
El estudio de Oleguer Junyent
Desde hace un par de años también se puede visitar, en visitas concertadas, el estudio de Oleguer Junyent, en la graciense calle de Bonavista. En el estudio se conservan numerosos recuerdos del escenógrafo, y se expone su colección de artes decorativas y de arte medieval catalán. También incorpora una interesante colección de muñecas y autómatas, así como numerosas prendas de ropa antigua, de lujo. Para visitar la casa hay que acordar una visita concertada.
Foto de portada: Palacio de los Vientos de Jaipur. Oleguer Junyent. AFB.