Guillem Gisbert empezó ayer noche la gira de Balla la masurca!, llenando el Apolo de cabo a rabo y con una larga gira que lo hará pisar muchos escenarios catalanes. Vender todas las entradas para la sala del Poble Sec antes de sacar disco es grande: "Permitidme que interprete que tengo en frente la línea dura de seguidores de Manel, por la parte que me toca os lo quiero agradecer, y también os lo agradezco por parte de Arnau, Roger y Martí que están por aquí escondidos", ha comentado en la primera interacción con el público.

Concierto Guillamos Gisbert / Foto: Irene Vilà Capafons
Guillem Gisbert ha presentado su disco en solitario en la sala Apolo / Foto: Irene Vilà Capafons

El cantante consideraba este primer concierto de gira un ritual de paso. Ha contentado a todo el mundo tocando en directo todas y cada una de las canciones del álbum y haciendo una versión íntima, con voz y piano en solitario de 'Ai Yoko', que ha removido la nostalgia que flotaba en el ambiente. Sí, esta noche ha sido raro ver a Guillem sin tener a su derecha a Roger Padilla, a la izquierda Martí Maymó y Arnau Vallvé cerrando el cuarteto. Pero no estaba solo, encima del escenario está acompañado de Jordi Casadesús (bajo, guitarra y programaciones), Glòria Maurel (batería y percusiones) y Arnau Grabolosa (guitarra, bajo y teclados).

Esta noche se ha hecho extraño ver a Guillem sin tener a su derecha a Roger Padilla,  a la izquierda Martí Maymó y Arnau Vallvé cerrando el cuarteto

Aparte de todo el repertorio del disco, también han tocado dos versiones en catalán, Tots a casa xiulen (Anyone Can Whistle, d’Stephen Sondheim) y Prou de Plors (Dry Your Eyes, Neil Diamond), algunas canciones las ha ido introduciendo: interpelando a sus compañeros de universidad con los que iba a la Autónoma para tocar Miracle a les Planes o la anécdota del reconocido guionista Rafael Azcona de Un home realitzat¸ donde Glòria Maurel ha hecho un grandísimo solo de batería. El público entregado y aplicado, ha hecho los deberes, y se ha notado la predilección ante canciones como Cantiga de Montse, Les dues torres, Waltzing Matilda o la canción que da nombre en el disco, donde hemos podido ver al cantante bailar encima del escenario.

Concierto Guillamos Gisbert / Foto: Irene Vilà Capafons
Guillem Gisbert ha llenado la sala Apolo en su primer concierto sin Manel / Foto: Irene Vilà Capafons

Era un poco una incógnita qué canciones gustarían y se cantarían más, sí que guiándonos por las escuchas en Spotify podías hacerte una idea, pero no es hasta el directo que no ves la magnitud. Ha dejado para el final el toque de folk y la armónica de Les aventures del General Lluna i Estudiantina, donde han propuesto un formato de tres guitarras, un ukelele y castañuelas, cantando a viva voz los 4 músicos al unísono.

La vocación, qué tema

El disco habla de la ausencia de la vocación y de vivir sin tener las cosas claras a la vida. El proceso de creación ha sido de aproximadamente dos años: "Ha sido un trabajo donde han aparecido en mi vida tareas diferentes y personas nuevas que me han ayudado mucho, también personas viejas que me han ayudado mucho de una manera nueva", ha reflexionado. Balla la masurca! ha tenido diferentes productores y ha sido y gestionado por el sello discográfico Cerámicas Guzmán.

Concierto Guillamos Gisbert / Foto: Irene Vilà Capafons
A Guillem Gisbert le vienen unos meses movidos y llenos de conciertos / Foto: Irene Vilà Capafons

Después de esta inauguración de la gira en Barcelona, a Guillem le vienen unos meses movidos y llenos de conciertos. Este sábado pase doble en Girona, en el Festival Strenes. La siguiente fecha es en Madrid, el 10 de mayo, y después irá pasando por diferentes escenarios catalanes como el del Embassa’t, Primavera Sound, Cap Roig o Porta Ferrada. Un primer concierto que va bien, ya marca los siguientes. Qué placer empezar la gira así.