La bailarina y coreógrafa Núria Guiu; la asociación de escritores PEN Catalán por los cien años de defensa de la libertad de expresión y de la literatura y la lengua catalanas; el dramaturgo Jordi Casanovas; el proyecto cultural Càntut. Canciones de tradición oral para difundir el patrimonio musical de transmisión oral de las comarcas gerundenses; y la escritora Rosa Fabregat han sido distinguidos con los Premis Nacionals de Cultura 2022, que ha anunciado el Consell Nacional de la Cultura i de les Arts  (CoNCA). El acto de entrega ha tenido lugar en el auditorio Fundación Miró de Barcelona. Los galardones son la distinción cultural más importante del país y se otorgan anualmente a personas, entidades o instituciones que hayan contribuido a la creatividad.

Premiados

El plenario del CoNCA destaca de Núria Guiu (Mollet del Vallès, 1985) su propuesta de lenguaje artístico y código propio como creadora donde indaga como coreógrafa la relación de la danza con el entorno digital, "siempre con una mirada socioantropológica". Graduada en el Instituto del Teatro en danza clásica, formó parte de IT Danza y posteriormente ha trabajado como bailarina en varias compañías internacionales. Además de su excelencia artística, disfruta de una gran proyección nacional e internacional, que ha encontrado apoyo en varias estructuras y festivales de toda Europa.

Por su partye, la distinción en el PEN Catalán llega coincidiendo con sus 100 años de defensa "continuada" de la libertad de expresión y de la literatura y la lengua catalanas. El PEN Catalán es el tercero de los centros creados por todo el mundo a partir del llamamiento del PEN Club, nacido en Londres en 1921, a crear una red internacional en defensa de la libre circulación de ideas y la libertad de expresión en todo el mundo. Para el CoNCA, es un ejemplo del valor de la creación, de la solidaridad y del intercambio franco entre literaturas y culturas en nuestro tiempo convulso y una manera de recordar que los conflictos, la censura y la violencia siempre pueden encontrar un espacio de paz en las letras, en las artes.

En cuanto a Jordi Casanovas (Vilafranca del Penedès, 1978), el plenario pone en valor su propuesta de teatro documental con un componente social y político que le ha permitido denunciar aspectos de la sociedad que "de forma habitual no se encuentran a los escenarios". "Su ejercicio de deconstrucción relativo a la sociedad catalana o a su capacidad de autocomprensión ha encontrado también el aplauso en otros lugares del mundo", se añade. Casanovas ha escrito más de una treintena de textos, que se han representado en varios países del mundo y ha sido impulsor de proyectos de difusión de la dramaturgia catalana contemporánea.

Sobre el Càntut, ha recibido la distinción por la valía del proyecto nacido el año 2012, que recoge y difunde el patrimonio musical de transmisión oral de las comarcas gerundenses con una clara vocación intergeneracional y de dar valor a la tradición acercándola a la actualidad, así como por "el acierto en la innovación" y la capacidad de proyección de un aspecto "a menudo menospreciado de la cultura".

Finalmente, a Rosa Fabregat (Cervera, 1933) destacan su larga trayectoria literaria y de compromiso cultural desde que empezó a escribir a los 14 años. Se ha dedicado principalmente a la poesía, pero también la novela y el ensayo, desde "lugares innovadores para su generación, como la ciencia ficción y el feminismo." Para el Consell, su trayectoria literaria e "constante y prolongada, siempre atenta a la problemática contemporánea, sin renunciar a la confrontación entre realidad y la interpretación lírica".

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Premis Nacionals de Cultura 2022 - Foto: ACN

Unos Premis Nacionals con cambios

Los Premios Nacionales fueron instituidos por la Generalitat republicana en 1932, se interrumpieron con la Guerra Civil en 1938 y se reanudaron en 1982 con la llegada de la democracia y el restablecimiento de la Generalitat de Catalunya. En 1995 creó la denominación de Premios Nacionales de Cultura para unos premios que se otorgaban en varios ámbitos culturales y disciplinas artísticas.

Desde el 2009, el CoNCA otorga las distinciones, cuando el Parlamento creó el órgano. Ya bajo la dirección del CoNCA, los Premios Nacionales de Cultura siguen evolucionando con el objetivo de adaptarse a los nuevos tiempos y trascender los sectores culturales. Así pues, en el 2013 se aprobó un decreto que limitaba los galardones a una única categoría, Premio Nacional de Cultura, sin hacer distinciones por sectores y limitados a un máximo de diez.

A partir del 2020, con el objetivo de incrementar el reconocimiento y el prestigio de la máxima distinción cultural del país, el plenario del CoNCA los vuelve a reformular y limita a cinco las personas o entidades galardonadas por la difusión de su obra, de su trayectoria intelectual, artística o de identidad compartida.