La restauración de un retablo de la catedral de Girona ha permitido descubrir el vitral figurativo –que quiere decir que hay escenas representadas– más antiguo de Catalunya. El hallazgo medieval data la primera mitad del siglo XIII. Se trata de una pieza de 1,3 metros de altura por 3 metros de anchura y está dedicada a los santos de la capilla donde ha sido encontrada, Sant Martí i Sant Francesc. Los pies y la parte superior del vitral son los originales mientras que la parte central se habría restaurado durante el siglo XIV. El obispo de Girona, Francesc Pardo, ha asegurado que ahora "habrá que encontrar un sitio adecuado" para exponerlo dentro del museo de la Catedral y eso comportará "un replanteamiento" de todo el equipamiento.

La catedral de Girona ha tenido un vitral medieval escondido detrás de un retablo durante casi medio milenio. Se trata de la pieza figurativa más antigua de Catalunya. Es decir, es el vitral con escenas dibujadas más viejo que hay y fecha de primeros del siglo XIII. El vitral más antiguo, se encuentra en el monasterio de las Santes Creus de Tarragona, pero no son figurativos, sino que hacen formas geométricas.

El 17 de octubre se empezó la restauración del retablo de la capilla de Sant Martí i Sant Francesc del templo gerundense y durante estas tareas se descubrió la obra medieval. El retablo tapaba totalmente la ventana donde había el vitral y, posteriormente, se habían construido otras dependencias de la catedral que también habían tapiado esta apertura por el otro lado.

vitral girona acn

Eso ha comportado que durante unos 500 años esta pieza quedara totalmente escondida, hasta ahora. Una de las restauradoras de este elemento patrimonial, Anna Santolaria, ha detallado que la obra se divide en dos partes: por una parte los pies y la parte superior del vitral que son de la primera parte del siglo XIII. De la otra, hay unos fragmentos de la parte central que serían de finales del siglo XIV.

La restauradora ha explicado que las partes del siglo XIII están formadas por "piezas muy pequeñas" y la parte central cuenta con "piezas mayores" y también hay "colores dorados con plata" que se utilizaba durante el siglo XIV.

Santolaria ha advertido que este hecho también es especialmente importante porque "permite estudiar la restauración durante la época medieval", ya que no han sufrido ninguna intervención más. De todos modos, el director del Tesoro de la catedral de Girona, Joan Piña, ha asegurado que el hallazgo tiene una "gran importancia" por la antigüedad del vitral, pero también "a nivel técnico", ya que "disfrutan de una gran calidad" en el dibujo.

Un vitral formado por diez plafones

El vitral tiene una altura de 1,3 metros y una anchura de 3 metros más y está dividido en diez plafones diferentes, de los cuales sólo se ha perdido uno. En ellos, se muestra a los dos santos de la capilla donde ha sido encontrado el vitral, Sant Martí i Sant Francesc. Además, hay representaciones de animales, vegetación, detalles arquitectónicos y pequeños personajes.

Santolaria ha explicado que los vitrales expuestos en esta capilla podrían proceder de la catedral románica que precedía el actual templo gótico gerundense. De hecho, la restauradora ha apuntado que ya habían encontrado otros restos de vitrales románicos en la capilla de Santa Caterina que apuntaba en esta dirección.

Repensar el museo para exponer el vitral

Aunque ya hace dos meses del hallazgo, los expertos todavía están estudiando a fondo el vitral medieval. Una vez se concluyan todos los análisis correspondientes, el vitral se expondrá a la catedral. De todos modos, el obispo de Girona, Francesc Pardo, ha detallado que habrá que hacer "un replanteamiento" del museo para "encontrar un sitio adecuado" donde enseñarlo.

De hecho, Pardo ha detallado que esta obra se tiene que enseñar al público con un conjunto de condiciones para garantizar que se ve con todo su potencial pero sin dañarla. Por eso ahora tienen que estudiar cuál es la mejor ubicación y qué condiciones tiene que tener la sala antes de mostrarlo al público.

Este vitral se sumará al patrimonio que se expone en el museo de la catedral, donde ya está el tapiz de la creación, una obra del siglo XI con un gran valor patrimonial, ya que es la única obra de pintura en la aguja que se conserva de esta época.