Este ha sido una Navidad atípica, a causa de la situación política de Catalunya, y así también se ha hecho patente al tradicional concierto de Sant Esteve, que ha estado marcado por la presencia de lazos amarillos entre muchos de los músicos y por el hecho de que se ha convertido en un clamor por la libertad de los presos políticos.
En el tramo final de la actuación, el Orfeó Català y el Cor de Cambra del Palau han interpretado el Cant de la senyera con una fuerte presencia de esteladas, también encima del escenario, que ha acabado con un fuerte clamor por la libertad. También se han podido ver entre el público algunos carteles de 'libertad presos políticos', dirigido a Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart; y pancartas de "democracia".
Acto seguido se ha interpretado los Segadors que ha acabado con una demanda de "independencia". Este es el primer año que se ha cantado de forma oficial el himno de Catalunya al concierto, después de que el año pasado se cantara de forma espontánea al final de la actuación. Así, este año se ha incorporado por primera vez el himno en los bises del repertorio.
El tradicional concierto de Sant Esteve en el Palau de la Música ha tenido este año como particularidad que muchas piezas han sido cantadas por los diversos corso conjuntamente, mientras que antes sólo se encontraban una o dos veces juntos encima del escenario, y que el hilo conductor del concierto ha sido el villancico Fum, fum, fum.
En el apartado de bises, no hay faltado El noi de la mare y El cant de la Senyera, que han cantado todos los coros. Y, como se ha señalado, se ha interpretado Els Segadors y un fragmento de 'Considering Matthew Shepard' de Craig Hella Jonhson, que también han cantado todos los coros.
El Concierto de Sant Esteve, que se celebra desde el año 1913, es uno de los hitos anuales más importantes del Palau y uno de los conciertos navideños con más tradición de Europa. En estos 104 años de historia, el concierto sólo se dejó de dar en varias ocasiones, por circunstancias excepcionales como la Guerra Civil, la primera posguerra, la gran nevada de 1962 o la reestructuración del coro.