El Teatre Lliure de Montjuïc ha programado un espectáculo de cabaré en clave femenina, que quiere ser un homenaje a la Barcelona canalla de los años 1920 y 1930 (los años de gloria del Paralelu), y también un reconocimiento a personajes como Maria Aurèlia Capmany, Guillermina Motta, Núria Feliu y Mary Santpere... CabaretA es una iniciativa de Bárbara Granados y Maria Molins, que crean el texto (la composición musical es de Bárbara Granados), con la colaboración de Joan Maria Segura Bernades, que firma la dirección. En el escenario Granados y Molins cuentan con el acompañamiento musical y de interpretación de Miquel Malirach y Jordi Morales. El espectáculo pasará por el Lliure de Montjuïc del 5 de abril al 14 del mismo mes.
Dúo de mujeres
Maria Molins y Bárbara Granados, una rubia y una morena, una de Barcelona y una de Madrid, una actriz y una intérprete, coincidieron en 2012 en un espectáculo en la Sala Muntaner. Y decidieron impulsar un espectáculo en que asumirían papeles bien diferentes de lo que estaban haciendo. Maria Molins, muy amante de la música quería cantar y sacarse "una espina que llevaba clavada en el corazón". Además, quería contagiar a los escenarios teatrales el entusiasmo que percibía, como público, en los conciertos musicales. Bárbara Granados, que venía del mundo de la interpretación, veía en el nuevo espectáculo una forma de "salir de la sombra" y "poder hacer lo que me diera la gana". El resultado es CabaretA, un espectáculo de cabaré en que es esencial la visión femenina. En realidad, Molins y Granados dedican un número a las mujeres que no pudieron estudiar ni destacar, como sus madres, auténticas "mujeres silenciadas". Y en todo el espectáculo incorporan algunos temas contra la misoginia y la discriminación de las mujeres, como "Maskulinum-femeninum" (una canción prohibida como "degenerada" en la Alemania nazi), "Theremina" (una denuncia de la falta de mujeres en el panorama cultural catalán) y, sobre todo, "La Paquita" (dedicado a las amas de casa).
Que no falte la política
Este es un espectáculo "cómico-crítico", como lo define su director, Joan Maria Segura Bernadas. Maria Molins afirma que había que abordar la política, necesariamente: "El cabaré es la forma de teatro más directa, que recoge aquello que pasa en la calle". Y en un tiempo en que la política está por todas partes, no podían faltar las referencias al proceso soberanista. CabaretA promete seguir el "día a día" de la política catalana, con un gag ("A ver si cuela, ¿dígame"?) en que una teleoperadora recibe llamadas de los políticos españoles; promete ir actualizando este número según cómo evolucionen los acontecimientos. También en el gag "Mare" se interpreta el tema Bohemina Rapsody, adaptado al proceso, sin embargo "sin posicionarse a favor ni en contra".
"Joan Petit" sin inocencia
Un gag estará dedicado a Joan Petit, un tema que, para nosotros, es una canción infantil, con una letra sin sustancia, pero que para los franceses es todo un himno a la resistencia antimonárquica y a la lengua occitana. En realidad Jean Petit fue un cirujano que dirigió la revuelta de los "croquants" en 1643 y que acabó siendo ejecutado por las fuerzas del rey de Francia.