No hace falta que lo busquen, Sant Esteve de les Roures no existe. Por lo menos em la vida real, porque sí que aparece en uno de los informes que la Guardia Civil envió al juez Pablo Llarena para justificar la violencia del movimiento independentista. En uno de los informes enviados por este cuerpo policial se detallaban unos 300 episodios violentos, algunos de los cuales se producían un municipio que ni siquiera existe: Sant Esteve de les Roures.

Los CDRs, sin embargo, han decidido crearle una cuenta de Twitter y aseguran que el municipio se encuentra entre "Vilassar de Urgell y Sant Fruitós de la Segarra", dos pueblos que, evidentemente, tampoco existen.