El Zoo de Barcelona vive una etapa de renovación y redefinición del modelo de parque zoológico donde, por una parte, busca convertirse en un referente de protección de la biodiversidad de la mano de la futura Ciutadella del Conocimiento, y de la otra, se prepara para una transformación también sobre el terreno, con la futura apertura de un paseo para peatones que conectará la Ciutadella con la Vila Olímpica. En este ámbito de cambios, llega otra novedad, el inicio de los trabajos de construcción de una reserva de animales, un nuevo espacio concebido y diseñado para acoger las especies del Zoo de Barcelona que, temporalmente, no puedan estar en sus instalaciones. En concreto, este nuevo espacio alojará aquellas especies que haya que trasladar para llevar a cabo actuaciones de mantenimiento y mejora al conjunto del parque.
Esta nueva reserva de animales se ubica en los terrenos del antiguo Aquarama, que fue derribado en julio del 2022, dejando como un recuerdo histórico el gran tanque de agua que fue hogar de la famosa orca Ulisses, además de espacio para exhibiciones de delfines. Ahora, la nueva reserva de animales constará de 3.500 m² distribuidos en cinco zonas exteriores, tres interiores y dos pajareras; todas ellas confortables, naturalizadas y adaptadas a las necesidades y dimensiones de las diferentes especies que acogerán, desde mamíferos hasta aves, reptiles y anfibios, entre otros. En los espacios interiores, además de áreas de reposo y climatización para las diferentes especies también hay salas para el personal cuidador. Esta nueva instalación supondrá una inversión de 1,9 millones de euros y estará lista la primavera de 2026. Los trabajos se harán garantizando en todo momento el bienestar de los animales del Zoo de Barcelona.
Nuevo espacio inmersivo
Precisamente, en este proceso de cambios, el Zoo de Barcelona estrenó en marzo Cuída'ls, un nuevo espacio inmersivo que invita pequeños y grandes a proteger la biodiversidad. La nueva instalación, situada junto al acceso por el parque de la Ciutadella, está concebida para dar la bienvenida a los visitantes y, de manera lúdica e interactiva, ayudarlos a descubrir cómo implicarse para preservar las especies y los ecosistemas. La presentación del nuevo espacio contó con la presencia del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, que destacó que la nueva experiencia inmersiva supondrá un "punto de inflexión por el Zoo del futuro", que se reformula como "espacio de defensa y divulgación de la biodiversidad y de la necesidad de preservar las especies".