Este jueves a primera hora, el Port de Barcelona ha tenido unos visitantes tanto inesperados como bienvenidos: cinco delfines mulares han nadado junto a la Rambla de Mar, justo ante la escultura del Miraestels, para después ensartar rumbo hacia mar abierto por la bocana Nord. El avistamiento ha tenido lugar hacia las 8:45 horas de la mañana y se ha alargado solo unos minutos, pero ha sido suficiente para que los afortunados que paseaban por la zona pudieran inmortalizar la escena. Es la novena vez que estos mamíferos marinos visitan el Port este año, casi el doble de lo que es habitual por estas fechas, según datos de la autoridad portuaria. La última aparición fue justo hace cinco días, el 20 de junio. "Esta mañana, a las 08:45 horas, hemos visto unos 5 nadando cerca de la escultura del Miraestels de la Rambla de Mar y acto seguido se han marchado por la bocana Nord", explicaba el Puerto a la red social X.

Fuentes del Port de Barcelona han confirmado a Betevé que todos los avistamientos de este 2025 se han producido durante los meses de marzo, abril, mayo y junio. Sin embargo, sospechan que en algunos casos se podría tratar del mismo grupo de delfines mulares, especialmente en avistamientos consecutivos como los de los días 9 y 10 de marzo o 30 de abril y 1 de mayo. Ante estas visitas marinas, el Port activa un protocolo para proteger a los animales y garantizar la seguridad de las operaciones portuarias. Las normas incluyen no acercarse a menos de 60 metros de los delfines, no superar los cuatro nudos de velocidad, evitar hacer marcha atrás o maniobras bruscas, no alimentarlos ni hacer ruidos que puedan alterarlos. El objetivo: respetar al máximo su presencia y no interferir en su ruta natural.

El avistamiento del 26 de marzo también fue capturado por las cámaras del puerto y compartido en las redes sociales, donde se podía ver un grupo numeroso de delfines nadando tranquilamente entre las embarcaciones. "¡Parece que el delfín del otro día avisó a sus amigos! Hoy han sido diez los delfines mulares que han visitado el Port de Barcelona", escribieron desde la cuenta oficial. Como en otras ocasiones, el Port activó los protocolos de seguridad para proteger los animales y garantizar el funcionamiento normal de las actividades portuarias.

También durante el mes de marzo, el día 5 concretamente, se produjo un episodio menos afortunado: la aparición de un delfín muerto en la playa de la Mar Bella. Las autoridades alertaron a la Fundació CRAM, de que se hizo cargo del cuerpo, y sus expertos determinaron que se trataba de una hembra adulta de delfín mular en estado avanzado de descomposición. Ante situaciones como esta, el CRAM recuerda que, si se detecta un animal marino con problemas, no se lo tiene que tocar ni no intentar devolverlo al agua, sino no avisar inmediatamente al teléfono de emergencias 112.