Una equivocación millonaria. Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha reconocido que ha dejado de pagar 25 millones de euros a la plantilla de buses en los últimos 18 años por un error contable. El caso se ha estado estudiando "a partir de un aviso" y se ha llegado a la conclusión de que durante todo este tiempo ha habido un cálculo erróneo que nadie había detectado, según fuentes de la empresa han explicado a la ACN.

Ahora, la compañía ha comunicado a los sindicatos que durante el 2022 devolverá la cantidad que obliga la ley, la correspondiente a los últimos doce meses. Una cantidad que sube hasta 1,7 millones de euros, según la tabla que la misma firma ha hecho llegar a los representantes de los trabajadores. Por su parte, UGT ha hecho pública la tabla en las redes sociales y ha anunciado que no está conforme con la decisión de TMB. Entonces, reclamará todos los retrasos.

El dinero del último año

El sindicato ha indicado en un comunicado que el error se produce desde 2003 y ha lamentado que la empresa quiera devolver sólo el dinero correspondiente al último año. De hecho, también ha lamentado que CGT haya aprobado la propuesta. La UGT ha considerado que por el hecho de no estar firmadas las tablas salariales desde la prórroga el convenio 2020-2021, hay "recorrido" para presentar la demanda.

Está siendo una semana difícil en TMB, ya que este problema millonario se suma a la polémica en torno al episodio que dos chicas y un conductor vivieron en un bus H16 de la empresa. La madre de las jóvenes denunció a las redes sociales que el chófer retuvo a sus hijas en el vehículo, hasta que estas amenazaron con llamar a su familia si no abría las puertas.

Problemas en movilidad

Este miércoles, sin embargo, la CGT ha salido en defensa del conductor y ha emitido un comunicado donde se ofrece una versión diferente de la historia. Según el chófer, las chicas no solicitaron parada, motivo por el cual siguió su camino. En este sentido, el sindicato ha recordado que los autobuses tienen prohibido parar en medio del trayecto y que hay que esperar a llegar en la siguiente parada para bajar.

También relacionado con la movilidad de la ciudad, los taxistas han convocado una marcha lenta este miércoles para exigir que se puedan instalar cámaras de seguridad en el interior de los vehículos. Los conductores han denunciado que están sufriendo "ataques extremadamente violentos" y que sus servicios jurídicos llegarán "hasta donde haga falta" porque consideran que el Institut Metropolità del Taxi está actuando contra la ley.

 

Imagen principal: Un autobús de TMB / Carlos Baglietto