La lluvia hizo acto de presencia este sábado por la tarde, justo cuando se celebraba la primera etapa de La Vuelta con una tormenta que fue a más. Además, Barcelona quedó a oscuras. Los equipos que hacían la contrarreloj inaugural de La Vuelta fueron los más perjudicados. De hecho el belga Remco Evenepoel se ha mostrado visiblemente enfadado. "No, ninguna pregunta. Y solo una respuesta. Es ridículo hacer una contrarreloj con esta oscuridad. No veíamos una mierda. Superpeligroso. La carretera está mojada, llena de agua. Es ridículo. No somos monos en un circo", ha destacado y recoge el diario Marca. "Así no se puede correr, no se ve una mierda".

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El joven belga, ganador de la pasada edición de La Vuelta, ha puesto el grito en el cielo al acabar la etapa y muchas eran las personas que se preguntaban por qué no se activaba el sistema de iluminado de la ciudad sino casi no se veía. La indignación ha llegado al ámbito internacional. Incluso, el NBC se ha hecho eco de la indignación del corredor belga: "Es como conducir un coche por una autopista en la oscuridad más absoluta y sin luces", ha afirmado.

Paralelamente a la indignación, la lluvia también provocó alguna caída entre los corredores, como la de Laurens de Plus. A causa de esta se tuvo que retirar de la competición.

¿Por qué no se encendieron las luces de la ciudad?

David Escudé, concejal de deportes del Ayuntamiento de Barcelona, explicaba en Mundo Deportivo que en previsión de lluvia, "la organización ya adelantó la llegada a meta del último equipo 15 minutos". Y tratando de buscar una respuesta a la falta de luces y el sistema de alumbrado de la ciudad, destacaba que el sistema se activa en función de la luminosidad y también por los temporizadores que se programan con una periodicidad anual. El mismo diario recuerda que estos días se encienden a las nueve menos cuarto. En este sentido, Escudé constata que este sábado las condiciones climáticas cambiaron de manera imprevisible. Detallaba que se había intentado avanzar la hora de encendido de las luces, pero que el sistema no lo permitía.

Fuentes de la organización de La Vuelta, destaca El Periódico, aseguran que no contaban con este escenario. Sabían que podía llover, pero las previsiones meteorológicas no contemplaban que el cielo quedara tan cubierto, como finalmente pasó. El mismo diario, habría consultado fuentes del ayuntamiento y la respuesta sería la misma: cambiar la planificación no es sencillo.

Este domingo, también con unas condiciones meteorológicas adversas, habrá que ver cómo se enfoca la segunda etapa de La Vuelta. La etapa 2 recorrerá el tramo entre Mataró y la ciudad Condal, que acabará con la subida en Montjuic, en las puertas del Estadio Olímpico Lluís Companys. Después de una jornada intensa sábado pasado, los 181.3 kilómetros de la jornada dominical se presentan como el colofón definitivo a un fin de semana de ciclismo en la capital catalana.

Según el calendario oficial, los ciclistas saldrán desde Mataró a las 12:00 horas y tienen llegada prevista en turnos a las 16:30 horas y las 17:30 horas. Habrá un aislamiento total del circuito entre las 15 horas y las 17:30 horas.

 

Imagen principal: ciclistas a la llegada, donde visiblemente se ve una ciudad a oscuras / Carlos Baglietto