La diferencia entre entrar en Barcelona en hora punta de la mañana —de 7.30 a 9.30 h— en transporte público o en vehículo privado desde cualquier punto de las coronas metropolitanas supone tardar un 20% más de tiempo si se hace en la primera opción con respecto a la segunda. Este es el principal dato que refleja el estudio 'Análisis de la experiencia de usuario en el transporte público de los accesos a Barcelona' presentado por el RACC este jueves por la mañana, que ha radiografiado los desplazamientos para acceder a la ciudad desde las redes de Rodalies, FGC y Bus Exprés (la red de autobuses de altas prestaciones, que incluye las líneas interurbanas con más demanda de cada demarcación).

De este dato se desprende, según ha apuntado el presidente del RACC, Josep Mateu, que hay al menos tres factores determinantes para escoger entre transporte público o vehículo privado, que son "la proximidad entre el domicilio y la parada de transporte público; que haya aparcamiento en destino, y el conocimiento de la congestión de tráfico", estos hechos, sumados al hecho de que la ocupación del transporte público en hora punta llega al 90% hace que desde el RACC se recomiende a Rodalies "el aumento de la frecuencia y capacidad y la mejora de la fiabilidad", mientras que para el Bus Exprés se pide "incrementar la frecuencia y reorganizar las paradas de los buses interurbanos en Barcelona".

Unos 10 minutos más, por término medio

El informe del RACC apunta que los usuarios de fuera de Barcelona que tienen que acceder en hora punta matinal a la ciudad tardan por término medio unos diez minutos más si lo hacen en transporte público que si acceden en vehículo privado. Ahora bien, según ha apuntado Cristian Bardají, Director del Área Movilidad del RACC, para los usuarios del transporte público, "invertir diez minutos más de su tiempo no les penaliza", porque valoran otros aspectos como el hecho de evitar las congestiones que se forman en las entradas de la ciudad. Con respecto a esta cuestión, el mismo estudio refleja que un 61% de los usuarios de transporte público disponen de vehículo privado.

Además, el estudio también apunta a un aprobado general del servicio de transporte público interurbano para entrar en Barcelona según los usuarios, ya que los encuestados lo valoran con una nota media de 5,7 puntos, que desglosado supone una nota de 5,9 para FGC, un 5,8 para el Bus Exprés y un 5,5 para Rodalies, una cifra que es un "contraste de realidad" según Bardají, con la expectativa de que este servicio obtuviera una nota más baja a causa de las incidencias que a menudo se producen. El estudio se ha elaborado con 1.100 encuestas a usuarios del transporte público interurbano.