Tal día como hoy, pero de hace cien años, el Ayuntamiento de Barcelona inauguró la Escola del Mar, un centro educativo situado en la Barceloneta que se convirtió muy pronto en un referente de la pedagogía moderna y que a pesar de cumplir ahora el centenario en su actual ubicación en el Guinardó, no olvida una fecha primordial en su historia, la del 7 de enero de 1938, cuándo un bombardeo franquista destruyó todo el edificio, hecho de madera, del que sólo quedaron los cimientos. Afortunadamente, ningún alumno ni ningún maestro resultaron heridos por las bombas lanzadas por la aviación fascista italiana.
Fue el 26 de enero de 1922 y bajo la dirección del maestro y pedagogo Pere Vergés, cuando se inauguró el nuevo centro con una idea de innovación, renovación y acercamiento a la realidad que rodea a los niños. Su primer emplazamiento estuvo en la calle del Almirall Aixada -desde abril del 2021, calle de Emília Llorca Martín-, de cara al mar y al lado de los también desaparecidos Banys Orientals. La ubicación fue escogida expresamente dentro de una pedagogía que combinaba la enseñanza con la preocupación por la salud de los alumnos y les ofrecía espacio al aire libre en primera línea de mar. El edificio original era de madera, de una sola planta y en forma de U, encima de una estructura de cemento sobre la cual había la arena de la playa.
Bases de las columnas del edificio de la sede de la Escola del Mar, en la Barceloneta, destruido durante el bombardeo del 7 de enero de 1938 en Barcelona. ANC. Gabriel Casas i Galobardes.
Innovador al cien por cien en un momento en que la Mancomunitat de Catalunya supuso un gran avance en la modernización del país, l'Escola del Mar acogía niños y niñas al 50% y se definía también por otorgar cargos de responsabilidad a los alumnos, además de incluir como parte del proyecto educativo la música, la lectura y el tiempo de juego. En l'Escola del Mar el alumno se situaba en el centro del aprendizaje. Y dentro de este modelo, buena parte de la actividad de la escuela se hacía al aire libre, en la playa. Los alumnos publicaban una revista, 'Garbí', donde escribían crónicas de lo que pasaba en la escuela.
El 7 de enero de 1938, en uno de los peores bombardeos de la aviación fascista italiana, aliada de los franquistas en la Guerra Civil española, una bomba destrozó el edificio, del cual sólo quedaron los cimientos. Con todo, el centro siguió su actividad con el mismo modelo pedagógico, primero en la Rosaleda, un espacio adyacente a la Font del Gat en Montjuïc y a partir de 1948 en su ubicación actual, en la calle Gènova, en el Guinardó, donde ha mantenido una metodología de trabajo que sitúa al alumno en el centro del proceso de aprendizaje, respetando y aceptando las diferencias de cada miembro de la comunidad educativa como hecho enriquecedor bajo el lema 'L'Escola del Mar nos enseña a pensar, sentir y amar'.
Celebración del centenario
Según ha informado el Consorci d'Educació de Barcelona, la celebración del centenario ha empezado este mismo miércoles con una salida de los alumnos del centro a la playa de la Barceloneta, que ha contado con la presencia del conseller d'Educació y presidente del Consorci d'Educació, Josep Gonzàlez-Cambray. El sábado, 29 de enero, habrá un acto en el recinto de la escuela actual, que estará abierto para quien quiera visitarlo de las 11:00 de la mañana a las 14:00 de la tarde. Actualmente, l'Escola del Mar tiene una línea de educación infantil y de primaria y está situada desde hace más de 60 años en el distrito de Horta-Guinardó.
Emplazamiento actual de l'Escola del Mar, en el Guinardó / Consorci d'Educació de Barcelona
Además, dentro de los actos del centenario de l'Escola del Mar se publicarán tres libros: uno de la recopilación pedagógica que acompaña la historia de l'Escola del Mar; otro de cuentos escritos por los niños de l'Escola del Mar de la Barceloneta antes de la guerra e ilustrados por los actuales alumnos de la Escola; y unotercero, qué está por hacer, con dibujos elaborados en un concurso de dibujo rápido, que contará con estampas de los espacios más emblemáticos de Barcelona, diseñados por niños de toda la ciudad. Durante el año también se llevará a cabo una carrera de banderas por la ciudad, pasando por diferentes ubicaciones en que ha estado la escuela en estos 100 años; documentales, exposiciones en el Born y el MACBA; y un álbum de cromos con una recopilación de fotografías de la escuela.