Dwayne Johnson, conocido cariñosamente como "The Rock", ha demostrado ser un verdadero revolucionario en la industria cinematográfica, revitalizando franquicias que estaban condenadas al fracaso comercial. Desde sus humildes comienzos como luchador en la WWE hasta convertirse en una de las estrellas más destacadas de Hollywood, su ascenso ha sido verdaderamente meteórico. Cuando Johnson hizo su transición al cine en 2001 con "El regreso de la momia", pocos podrían haber anticipado el impacto que tendría en la industria. A pesar de ello, al principio se vio limitado a roles donde interpretaba a un hombre fuerte con un buen corazón, alcanzando su punto más bajo con la comedia "Rompedientes" en 2010.

Sin embargo, Johnson supo adaptarse a los desafíos y cambiar su rumbo cuando fue necesario. En una entrevista con Yahoo en 2014, reveló como esta película en particular, que afectó su imagen considerablemente, lo llevó a cambiar de representante, lo que finalmente resultó ser una decisión acertada. Desde ese momento, ha participado en una serie de franquicias exitosas, como "Fast and Furious", donde su personaje, Luke Hobbs, revitalizó la serie a partir de la quinta entrega. Además, ha protagonizado sus propios blockbusters, como "San Andrés", "El rascacielos" y la reciente "Black Adam" para DC.

El ‘Viagra de las franquicias’: el apodo que lo dice todo

De acuerdo con la entrevista mencionada en Yahoo en 2014, uno de los momentos más destacados es cuando se revela un mote peculiar que Dwayne Johnson ha ganado en Hollywood. Este apodo, acuñado por Jon M. Chu, director de "G.I. Joe: La venganza" (2013), quien colaboró con The Rock en esa película de acción, es "el viagra" de las franquicias. Es posible que sea la primera vez que escuchas este apodo, pero sin duda es uno de los más singulares que ‘The Rock’ ha obtenido en la escena cinematográfica de Hollywood.

El apodo de "el viagra de las franquicias" que se le atribuye en Hollywood no es infundado. Johnson ha demostrado una y otra vez su capacidad para convertir proyectos en oro en términos comerciales. Un ejemplo claro de ello es la película "Jumanji: Bienvenidos a la jungla" (2017), secuela de la aclamada película de 1995, que recaudó más de 960 millones de dólares a nivel mundial. Esta hazaña se repitió dos años después con "Jumanji: Siguiente nivel", aunque la recaudación disminuyó ligeramente hasta alcanzar los 800 millones de dólares.

Influencia en las redes sociales: una herramienta poderosa

Pero no es solo su presencia en pantalla lo que impulsa el éxito de las películas en las que participa. Su influencia en las redes sociales, donde cuenta con más de 397 millones de seguidores solo en Instagram, también desempeña un papel crucial. Johnson ha sabido capitalizar estas plataformas para promocionar sus proyectos y conectar con su audiencia a nivel mundial, estableciendo así una relación directa con sus seguidores y transformando el paisaje del marketing cinematográfico, marcando un precedente notable en Hollywood. Con proyectos futuros en camino, como la secuela de "Vaiana" y la próxima entrega de "Fast and Furious", queda claro que Dwayne Johnson sigue siendo una fuerza imparable en la industria del cine. Su habilidad para resucitar franquicias y llevarlas a nuevas alturas lo convierte en un verdadero ícono del cine de acción y un activo muy valioso para cualquier producción.