María Gómez es periodista de Mediaset. Estos días ha estado en Rusia informando del mundial de fútbol y haciendo un seguimiento como reportera de la selección española. El sábado, en la previa del partido de octavos de final entre España y los anfitriones, publicó un vídeo suyo donde, en medio de una conexión, aparece un hombre y le da un beso en la mejilla.

Ella, sorprendida, está a punto de decirle "gilip...", mientras exclama la frase "es que, de verdad...", después de haber asistido incrédula y en primera persona a este momento. Tal como ella misma escribe, cuelga el vídeo por aquellos que dicen que actos como estos son bromas y que algunas mujeres exageran. Muchos usuarios, como la actriz Letícia Dolera, han aplaudido la publicación de este documento:

No es la primera vez que se ve una imagen como esta en este mismo mundial. Hace unos días, la periodista de Globo Esporte, Julia Guimaraes, denunciaba una situación idéntica mientras estaba haciendo su trabajo:

En el caso de María Gómez, sin embargo, no a todo el mundo le ha parecido bien la denuncia pública. Pero de entre las voces contrarias, algunos medios le han atribuido unas durísimas palabras a Mónica Marchante, compañera de profesión y periodista de Movistar que se ha dedicado durante muchos años al periodismo deportivo.

 

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Según algunos, Marchante habría puesto el foco no en el aficionado que irrumpe delante de cámara para decirle "guapa" a la reportera y hacerle un beso, sino en María Gómez: "A mí no me parece machista que me llamen guapa. Igual es porque no me llevaron nunca a un Mundial sin tener ni idea de fútbol, ni me pusieron de florero en la foto de equipo rodeada de machitos. Y mucho menos llevando 5 minutos de periodista deportiva", habría comentado Marchante en referencia a su colega de profesión. Pero todo es fruto de una nueva muestra de la lamentable falta de rigor que circula por la red. Unas declaraciones virales que la propia Marchante ha tenido que desmentir.

 

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La crítica también contenía frases como "Te ponen de adorno y enarbolas la bandera del feminismo después de pasarte el Mundial entrevistando gente en la calle porque no vales para otra cosa?? Venga coño!!. Ah, por cierto, si es machista que te llamen guapa... ¿qué es ponerle la mano en el hombro al entrevistado? Igual el tío se sintió acosado...". Un ensañamiento del que ella no es responsable, pero que lamentablemente circula por la red desde hace horas como si fuera obra suya.

 

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Gómez ha sido la única mujer delante de las cámaras del equipo de la tele de Vasile desplazado a Rusia y siempre ha mostrado su enojo cuándo algunos la han querido comparar con la nueva Sara Carbonero: "Jolín, cuando hay un nuevo colaborador no dicen el nuevo Manu Carreño". Y sobre la cuestión del beso, escribió en Instagram: "Lo he dicho y lo repito: no somos muñecas, floreros, objetos,ni trozos de carne esperando besos que no pedimos. Somos profesionales haciendo nuestro trabajo y lo único que exigimos es respeto. Un respeto que no han tenido ni con ella, ni con Mónica Marchante ni con el periodismo.