Después de acabar con su exmarido Antonio David Flores y alejarse definitivamente de sus hijos, Rocío Carrasco apunta ahora contra el resto de miembros de la estirpe familiar, con los que no se habla desde hace años. El tío Amador, el padrastro Ortega Cano, la hermana Gloria Camila... todos ellos están en la diana, y cuando empiece el otoño se ocupará de ellos convenientemente en la segunda parte de su polémico documental. Mientras llega el momento, no se puede decir ni mucho menos que vivan plácidamente: por ejemplo, la hermana influencer tuvo que ir a la policía a denunciar los insultos y amenazas que recibe vía redes sociales, mientras que el torero acaba de ser operado del corazón y su estado es preocupante. Desgraciadamente para ellos, las malas noticias no acaban aquí.

Rocío Carrasco entrevista final Telecinco

Rocío Carrasco entrevista final / Telecinco

Hay otro miembro de esta rama familiar que no ve el final de su calvario personal. José Fernando, el otro hermano de Rociíto y Gloriaca, ha visto como sus expectativas de salir del psiquiátrico y volver a hacer una vida normal se han desvanecido por la decisión de un juez, que ha alargado su internamiento un año más. El joven lleva 4 años encerrado en un centro por sus problemas con las adiciones y la justicia, y si bien su salida estaba prevista para este mes de junio, todo ha cambiado de un día para el otro. La razón, informa la revista 'Semana', es haber roto la orden de alejamiento de su pareja y madre de su hijo, Michu, personaje bien polémico. La medida impedirá que el joven pueda celebrar su cumpleaños (29) con los suyos. Para acabar de arreglarlo, también le han restringido las llamadas telefónicas como castigo por su fuerte carácter. Un palo descomunal en medio de una tormenta que no cesa.

ortega cano se gloria jose GTRES

José Ortega Cano, José Fernando y Gloria Camila / GTRES

José Fernando Ortega

José Fernando Ortega / GTRES

La incógnita es saber cómo se habrá tomado la noticia en casa de Carrasco. La relación con sus hermanos es nula. Quizás el más satisfecho sería Fidel Albiac, que no los quiere para nada, y los considera de forma peyorativa "los inmigrantes", al haber sido adoptados en Colombia por Rocío Jurado y Ortega Cano. No da la impresión que la relación haya cambiado lo más mínimo.