A Quim Torra ya le han dado la bienvenida y todavía no se ha sentado en el asiento del Parlament como presidente de la Generalitat. Una bienvenida calurosa, especialmente, desde los medios de comunicación unionistas. Probablemente piense que si le atacan, alguna cosa bien hecha habrán hecho con su elección, tal como ha recordado Pilar Rahola:

Esta mañana las dos grandes damas de la televisión estatal, Ana Rosa Quintana y Susanna Griso, han dedicado bastantes minutos a hablar del hombre del día. Quintana haciendo teatrín en El programa de Ana Rosa, dándole el pinganillo a una colaboradora haciendo una parodia sobre un gobierno catalán donde Puigdemont dice lo que se hace en todo momento y un Torra que será poco más que un títere, según la presentadora.

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Telecinco

Griso ha tenido una ocurrencia, en teoría, más alejada de la parodia, cuando ha invitado al ex presidente de la comunidad autónoma de Madrid, un Joaquín Leguina a quien han sacado del sarcófago. Y digo en teoría, porque en la práctica, la entrevista ha bordeado la caricatura y el esperpento y se ha parecido más a una comedia grosera de Torrente. ¿Por qué? Porque Leguina ha proferido unos insultos absolutamente gratuitos a quien será el próximo presidente de los catalanes.

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Efe

Griso le ha leído al político socialista algunos de los tuits escritos hace años por quien será el futuro presidente de la Generalitat: "los españoles solo saben expoliar", "oir hablar a Rivera de moralidad es como escuchar a los españoles hablar de democracia" o "vivimos ocupados por los españoles desde 1714". "¿Qué le parece a usted?", le pregunta la periodista a Leguina. Respuesta: "¿Y él vivía en 1714 este gilipollas? Este es un imbécil, hombre, este es un imbécil". ¿Qué ha hecho la presentadora catalana? Ponerse las manos en la cara, con no toda la convicción del mundo, y riñendo al político como quien riñe a un niño pequeño que ha hecho una travesura: "aaaiii, señor Leguina, no me insulte a la primera de cambio, se lo pido. Quizá se desdice de estos tuits...". El perla, por cierto, no ha entendido el tiempo verbal utilizado por la periodista y le ha respondido: "No, si a usted no la insulto. Pero este es un imbécil". Puedes ver el momento cliqueando en la foto.

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Carta blanca en las teles españolas para insultar a quien será el presidente de los catalanes. Para criticar los tuits ofensivos de Torra, qué mejor que insultar ellos también. Y así ir haciendo. ¿Se imaginan que algún tertuliano hubiera dicho lo mismo hablando de Mariano Rajoy o de la ex presidenta de la Comunidad de Madrid? Y mira que Cristina Cifuentes las ha hecho de padre y muy señor mío como para que a más de uno se le calentara la boca...

Dirán lo que dirán de TV3, pero si la memoria no me falla, cuando en el programa Preguntes freqüents, no ya una invitada o una tertuliana, sino una persona del público, le llamó "hijo de puta" al ex diputado de Ciudadanos Jordi Cañas, la presentadora, Laura Rosel, exigió respeto al público y le pidió disculpas al invitado, de manera mucho más contundente que la que se ha visto hoy en Antena 3.

Leguina, por cierto, ha seguido vomitando piropos por la boca, al decirle a Griso que si él fuera el presidente del gobierno no quitaría el 155. "Eso lo decide el Senado y no este Quim Torras", ha dicho. Falta de respeto al cuadrado: por llamarle "éste" con menosprecio y por decirle "Torras", con "s", que lo mínimo que se le puede exigir a un político se supone que de primer nivel, es que pronuncie bien los nombres del resto de políticos. El final de la intervención de Leguina ya es de traca: "Este señor (Torra) está deslegitimado desde su pro-pia literatura, está insultando a todos los españoles"... Siguiendo el criterio de él mismo, el señor Leguina también está deslegitimado para decir nada sobre los catalanes en el momento en que utiliza insultos como gilipollas o imbécil hacia Torra. Pero eso no se lo ha dicho Susanna Griso a Leguina. Una pena.