Los papelones de la Familia Real son canela fina para Federico Jiménez Losantos. El excitado comunicador los consume con éxtasis. No importa que sean vacíos, forzados, gélidos e inverosímiles. Losantos los toma por obras maestras. Y necesita más. Mucho más. En bucle. Ahora bien, el pobre y moderado personaje no puede hacerlo por la conjura socialcomunistabilduetarraindepe o como diantes le llame. Los enemigos de la patria censuran a los reyes a través de TVE porque "no les soportan".
Así se ha referido Losantos a la forma en la que la cadena pública retransmitió el acto de luto oficial de Felipe, Letizia y las niñas por La 1. Un minuto y fuera, pasando a enseñar imágenes en otros lugares del estado. Intolerable, claro. Y la mejor prueba de las fechorías del gobierno Sánchez, "gentuza". Lo que resulta paradójico es que el locutor consideraba el acto como una porquería de un ejecutivo al que odia: "yo no me uno a nada que organice este gobierno salvo si va a la cárcel". Pero si va El Preparao, "paren máquinas". Losantos se traga el show como el último capítulo de su serie favorita y le lame las suelas de los zapatos.
Puedes escucharle a partir del minuto 20:
Con la monarquía pasa igual que con Federico: con un minuto sobra. El tiempo suficiente para que digan que se marchan.