La periodista catalana Carme Chaparro está alejada del foco mediático preparando más programas de Mujeres al poder, después de retirarla de las emisiones en directo de lunes al viernes de Cuatro al día. Para los que la queráis seguir de momento, podéis recurrir a su Instagram personal. Carme es periodista pero también escritora de libros de éxito y una influencer próxima a la gente.

En su última publicación, muchos le reprochan que se ha operado la cara y está perdiendo su expresión natural. No es la primera vez que le comentan pero esta vez, la catalana no ha podido más y ha contestado a los que la han señalado: "Si sin operarme estoy así, con estos pómulos, piel y ojos... Imagínate si llego a pasar por quirófano". Y emplaza a sus seguidores a pararla cuando la vean por la calle y comentar la jugada en directo: "No me molesta para nada los comentarios. De verdad, la próxima vez me paras y hablamos. Un abrazo".

Captura buena

Captura respuesta carme

Se lo toma con humor. ¿El motivo de sospechar de Carme? Esta foto, juzguen ustedes mismos.

Carme Chaparro ultima foto

Chaparro niega cualquier operación estética pero también existen los filtros de las fotografías. Ella hace caso omiso e insiste en que esta es su belleza natural. Si comparamos la imagen con la que proyectaba unos años atrás en la televisión, se tiene que reconocer que, como el buen vino, mejora con el tiempo. Aquí tenéis la relación consecutiva de tres imágenes suyas: la primera en la década de los 90, la segunda el año 2007 y una actual.

Carme Chaparro antigua

2007 2008 Carme Chaparro

Actual Carme Chaparro

Los usuarios insisten en que no los engaña y reiteran que tiene que dejar de pasar por quirófano y tunear las fotografías y le preguntan: "¿A qué vienen estos filtros? No los necesitas", "Si las personas empiezan a retocarse quedan muy feas", "La verdad es que tienes una cara muy extraña" o "Sólo hace falta buscar una fotografía tuya de hace siete años para ver que tenías alguna arruguita".

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Captura 3

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Su belleza, por dentro y por fuera, es inmensa. ¡No la dejes perder, Carme!