Fernando Tejero, uno de los rostros más populares del cine y la televisión española, reflexionó sobre la crispación social en su paso por el pódcast Poco se habla. Durante la charla, el intérprete confesó que el mundo actual le resulta difícil de entender y que, en los últimos años, ha percibido un cambio negativo en la convivencia.
“Veo como un odio generalizado, de la pandemia hacia aquí”, explicó, señalando que lo que más le preocupa no son solo los conflictos internacionales o las injusticias sociales, sino también el clima cotidiano de enfrentamiento.

Polarización y redes sociales
Tejero apuntó que la crispación se ha multiplicado con el auge de las redes: “Todo son bandos, van a por una persona y van 8.000. Nadie se puede equivocar”. En su opinión, esa dinámica convierte cada error en una condena pública, generando frustración y miedo a expresarse.
El actor reconoció que incluso ha optado por alejarse de las noticias para protegerse: “Las noticias para mí son como cogerte un cubo de mierda y echártelo por encima por la mañana. Prefiero ponerme ópera que desayunar con política”.

Una mirada crítica y personal
Conocido por papeles icónicos en Aquí no hay quien viva o La que se avecina, Tejero también habló de su sensibilidad ante las injusticias: “Hay días que me cuesta entender el mundo en el que vivimos, que mueran personas en guerras, que se maltrate a mujeres, niños o animales”.
A sus 60 años, el actor asegura que intenta mantener la calma en un entorno cada vez más hostil, pero no oculta su preocupación: “Me da miedo protegerme tanto, porque siento que cada vez me aíslo más”.