Bradley Cooper, la estrella de Hollywood, ha dejado huella en la industria del cine con una carrera que abarca más de dos décadas, y una versatilidad que lo ha llevado a desempeñarse como actor, productor ejecutivo, guionista y director. Recientemente, tras concluir la filmación de "Maestro", una película que narra la vida de Leonard Bernstein y marca el debut actoral de su hija Lea, el protagonista de películas como ‘Resacón en Las Vegas’, ‘Ha nacido una estrella’, o ‘Sin Límites’ ha revelado aspectos poco convencionales de su enfoque en los sets de rodaje.

¡No a las sillas! La manía de Cooper para mantener la energía

En una reciente entrevista con ‘Variety’, el estadounidense reveló su singular enfoque en los rodajes que dirige, revelando algunas de sus manías durante el rodaje de sus películas. Cooper destacó su firme deseo de mantener una atmósfera enérgica, evitando que el cansancio se apodere del set. ''Para mí fue una transición natural una vez que me atreví a escribir y dirigir una película. Y cuando dirijo no hay sillas. Siempre he odiado las sillas en los platós; tu energía decae en cuanto te sientas en una silla'', comentó.

En el caso de 'Maestro', el ex de Irina Shayk ha encarado un desafío significativo en este proyecto al asumir tanto el rol de director como el de actor principal, interpretando al propio Bernstein. Esta marca su segundo trabajo como director tras su exitoso debut en 'Ha nacido una estrella', película en la que compartió protagonismo con Lady Gaga. 'Maestro' ha sido muy bien recibida en las salas de cine y ya cuenta con nominaciones para los Globos de Oro.

Además de su decisión de retirar todas las sillas del set, Bradley Cooper se adentró profundamente en el papel de Leonard Bernstein para "Maestro", buscando inspiración desde su infancia hasta sus días de posgrado, sumergiéndose en diversas experiencias para dar vida al personaje de manera auténtica. “Yo amaba la conducción desde pequeño, pero me refiero a jugar a que conducía”, compartió en la entrevista con Variety el pasado 8 de diciembre. “Le pedí a Santa Claus por una batuta cuando tenía como ocho años y conducía todo el tiempo, porque en mi casa siempre se escuchaba música clásica”, agregó. El actor también compartió que mientras estaba en la escuela de posgrado, escribió un monólogo sobre un director, fortaleciendo aún más su vínculo con esa figura. "Sabía que había pasado tanto tiempo en creer que soy un conductor que, si en algún momento tenía la oportunidad de interpretar, había años de ensayo detrás de mí”, explicó.

El profundo compromiso de Bradley Cooper con el personaje de Bernstein

Además, su compromiso fue más allá, al dedicar seis años a investigar a fondo el personaje, incluso consiguiendo grabaciones exclusivas de Bernstein en acción, lo que le permitió capturar la esencia única de este genio musical. Pero no se detuvo ahí, ya que también asistió a la Filarmónica de Los Ángeles bajo la dirección de Gustavo Dudamel, quien interpretó la misma pieza que Bernstein. Desde el primer ensayo hasta el último, Bradley Cooper se sumergió por completo en este compromiso, marcando el inicio de una profunda exploración en el universo de la dirección orquestal.