Miguel Bosé está de gira después de muchos años desaparecido por sus problemas de afonía, sus problemas con Hacienda, sus problemas con el padre de sus hijos Nacho Palau y los problemas con la realidad, desbarrando sobre el COVID y teorías conspiranoicas antivacunas de cuñado. Es el señor que separó a sus cuatro hijos dependiendo de con qué esperma habían sido gestados: los del suyo son dos gemelos ricos y llenos de mayordomos, y los gemelos del esperma de Palau, en la miseria. Es negacionista de todo, un despropósito. El personaje se ha comido a la persona y con casi 70 años ha vuelto a los escenarios. Este jueves intentó llenar el Palau Sant Jordi pero nada, solo 8500 personas. Y eso que hace casi diez años que no actuaba en Barcelona, desde el Fòrum en el 2017. Y volvió a decepcionar.
Algunos todavía recuerdan como a medio concierto en el Liceo en el 2013 se le rompió la voz y empezó a no poder cantar, afónico, sufriendo, sin entenderse nada. Algunos catalanes percibieron aquel día en Barcelona que Bosé se acabó. Él nunca lo ha reconocido y anuncia que ha recuperado milagrosamente la voz para hacer otra gira. Pablo Motos o Jordí Évole nunca le hacen la pregunta: "¿Harás playback en tu gira?". Nadie se explica cómo puede seguir afónico en las entrevistas y cantar con la voz tan poderosa y clara como la que él mismo anuncia en redes. Esta es su cuenta de Twitter anunciando el concierto de Barcelona, agucen el oído. Audio y vídeo:
Si Bosé quiere mover la boca como un muñeco de ventrílocuo y que suene su disco que lo anuncie en el cartel de la gira: "Concierto en riguroso playback". Una gira que Bosé ha denominado, muy paradójicamente, Importante. La jeta es máxima. Un programa de TV se ha atrevido a denunciar la engañifa de pagar 95 euros para oír un disco. Sus enemigos Jose Manuel Parada y Saúl Ortiz lo destripan en Telemadrid. . Saúl: "Espectáculo gortesco de Miguel Bosé en Madrid. Yo no he ido gracias a Dios, ha engañado a la gente que va. El 95% del tiempo que está en el escenario es con playback. Y el otro 5% es un desastre". Parada: "Cuando hablaba estaba afónico y cuando cantaba no estaba afónico. A lo mejor aprendió a cantar con afonía. Hay mucho artista que está trabajando con playback últimamente".
La sangría sigue: "Es injusto para los que le admiramos que no cuente la verdad, qué le pasa y por qué no puede cantar. Su voz es completamente oscura, está afónico y le cuesta mucho vocalizar. Tiene una dificultad masiva para hablar, así que es imposible que cante como canta. Si la gente quiere escuchar el disco de Miguel Bosé, que me paguen a mí los 80 euros y yo se lo pongo". En Barcelona también estaba afónico y también puso playback en el Sant Jordi. Así lo disimula La Vanguardia en la crítica del concierto: "Bosé continúa afónico. Los escarceos gallináceos de su voz cuando habla al público lo evidencian; en cambio el que canta suena bien. Entonando sin excelencias, pero bien. Es tanta la diferencia entre una y otra voz que se ha extendido la teoría de que Bosé se vale de alguna pista pregrabada para parcialmente complementar su voz en partes complicadas. Lo que vendría a ser una voz de apoyo, vamos, frecuente también en otros artistas". Los críticos musicales no osan denunciar la engañifa, la gran mentira. Otra de Bosé.