Brad Pitt es conocido por su éxito en la industria del cine. Sin embargo, su antiguo compañero de piso, Jason Priestley, ha destapado algunos secretos sorprendentes sobre los días difíciles en los que compartieron piso. Entre competiciones extrañas de tiempo sin ducharse y regalos inusuales, la vida de Pitt antes de la fama no fue tan glamorosa como podría pensarse. En la década de los 90, la serie ‘Sensación de vivir’ se convirtió en un fenómeno juvenil, catapultando a la fama a su elenco, pero ninguno de ellos logró convertirse en una verdadera estrella de Hollywood. Sin embargo, Priestley estuvo cerca de la fama al vivir con alguien que sí alcanzaría la cima: Brad Pitt.

En 1987, cuando Pitt aún luchaba por abrirse camino en la industria, se encontró durmiendo en el sofá de Priestley y compartiendo piso con él en North Hollywood. A medida que su amistad crecía, ambos se apoyaban mutuamente en su búsqueda de oportunidades como actores y en su lucha diaria para sobrevivir con poco dinero. En el libro “Jason Priestley: las memorias” y en una entrevista concedida a ‘Entertainment Tonight’, Priestley recordó aquellos días difíciles en los que buscaban oportunidades como actor y no sobrevivían con el poco dinero que tenían. “Vivíamos a base de ramen, cerveza de marca blanca (esa que venía en latas con etiquetas donde ponía: "CERVEZA") y cigarrillos Marlboro light. No teníamos dinero”, reveló Priestley. Y aunque el dinero escaseaba, la determinación de hacerse un nombre en el mundo del espectáculo los mantenía en pie.

La competición más excéntrica: resistir sin ducharse, el desafío entre amigos

Sin embargo, no todo era trabajo y supervivencia. Priestley revela que, entre sus travesuras, se embarcaban en competiciones para ver quién podía aguantar más tiempo sin ducharse. “Para divertirnos, hacíamos competiciones a ver quién podía aguantar más sin ducharse ni afeitarse. Brad siempre ganaba. Ir a una audición implicaba asearse y es lo que solía acabar con la racha…”, recordó el compañero de Luke Perry y Shannen Doherty en ‘Sensación de vivir’.

Regalos inesperados: la Navidad memorable con biblias de Brad Pitt

Además de sus excéntricas competiciones, Priestley recuerda una Navidad en la que Pitt regaló biblias a todos los compañeros de piso. Según Priestley, Pitt había visitado a su familia en Misuri y volvió con este inusual regalo para sus amigos. Aunque pueda parecer un regalo muy curioso, Priestley afirma que “eran muy monas, yo todavía tengo la mía en la estantería". Estos detalles revelados por Priestley ofrecen una visión fascinante de los primeros días de Brad Pitt antes de convertirse en una de las estrellas más influyentes de Hollywood. Mientras que muchos pueden envidiar su éxito actual, es importante recordar que el ex de Angelina Jolie tuvo que enfrentar desafíos y dificultades en su camino hacia la fama. Además, demuestra que, al igual que cualquier otra persona, disfrutaba de las travesuras y las pequeñas extravagancias, como pasar varios días sin ducharse.