Una de las grandes pasiones de la periodista y presentadora de Esplugues, Mercedes Milá, es la bicicleta. Cuando no está en un plató de televisión rodeada de cámaras y focos, lo más habitual es buscarla en medio de un campo o de un bosque, encima de una bici, pedaleando relajada y saboreando los diferentes paisajes con los que se va encontrando. Ciclista empedernida, a la mínima que puede se pone el casco, coge una bici, y empieza a pasear allí donde se encuentre.

La presentadora se encontraba estos días en Francia, donde estaba pasando las vacaciones y donde a menudo se pasaba los días haciendo rutas arriba y abajo. Y en la última escapada que ha hecho, ha tenido un susto mayúsculo que la ha llevado de cabeza al hospital. Ella misma, las últimas horas, ha hecho como siempre, salir a pasear y hacerse fotos con todo lo que le llamaba la atención, árboles centenarios o coches abandonados:

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Pero la última excursión ha acabado de manera dolorosamente inesperada. Explica, cogiéndose el brazo, que iba montando por "bosques maravillosos" cuando de repente se le ha cruzado por delante un insecto, un tábano, con la intención de picarle. Al tratar de librarse del bicho, ha perdido el control del manillar y ha acabado "en una zarza que tenía maderas y cosas dentro. Ahí noté al caerme que me rompía el hombro. Un dolor bestial. Si alguno ha tenido alguna vez un problema en el hombre, lo sabe. Costó mucho sacarme de la zarza y me llevaron al hospital, donde me hicieron una radiografía y vieron que el húmero estaba roto", explicaba. Eso sí, sin perder la sonrisa y con buen humor. Ella misma ha publicado un stories explicando el incidente, acabando con unas imágenes de cuando ha estado en el hospital. Por suerte, al no haber desplazamiento del hueso, Mercedes Milá se ha librado de tener que pasar por quirófano y no la tendrán que operar. Eso sí, de lo que no se ha librado es de un aparatoso vendaje y un arnés para tenerle inmovilizado el brazo. Y con este aspecto tendrá que estar 40 días. Un mal menor.

"Estoy de buen humor, esto es importante y tengo experiencia de otros casos", dice ella.  " 'Gracias a Dios no tenía desplazamiento en la rotura, por lo que no me van a tener que operar. Esto lo voy a tener que llevar durante 40 días y tendré que estar sin moverme. Ni siquiera me voy a poder poner desodorante, así que no os acerquéis a mí". Como ven, no ha perdido su buen humor. Una demostración más de que a pesar de esta  desagradable experiencia, la presentadora catalana vuelve a dejar claro que  a optimista, positiva y quitarle hierro a las malas noticias no hay quien la gane. Un susto que afortunadamente no ha tenido que lamentar males mayores. Ahora, la presentadora dejará Francia para ir a España a seguir con la recuperación.