Belén Esteban pasaba por uno de los mejores momentos de su vida, sin embargo, su vida ha dado un giro de 180 grados y en estos momentos pasa por un auténtico calvario. Hace casi un mes que la colaboradora se fracturó la tibia y el peroné en directo mientras realizaba una prueba de ‘Supervivientes’ en ‘Sálvame’. Los tertulianos debían aguantar el mayor tiempo posible agarrados a una barra de metal. Con tan mala suerte, las manos de Belén Esteban resbalaron y se cayó.

Rápidamente, la llevaron a urgencias y recibió el diagnóstico. Se le dio fecha para ser operado dos días más tarde, sin embargo, tuvo que volverse a casa porque le había salido una infección con la escayola. Dos semanas más tarde ha podido ser operado, aunque la recuperación será muy lenta. Aún permanece en el hospital, ya que debido a su diabetes debe estar más controlada.

Belén Esteban : MEDIASET
Belén Esteban / MEDIASET

Todo ha ido bien, pero Belén Esteban tiene muchos dolores. Además, tiene síndrome de abstinencia. La colaboradora está acompañada en todo momento por Miguel Marcos y Andrea Janeiro. Se encuentra en una habitación privada, pero no puede hacer absolutamente nada. Permanece inmóvil en la cama.

La última hora sobre el estado de salud de Belén Esteban 

"La recuperación es muy dolorosa y tienen que ponerle muchos calmantes que la dejan somnolienta todo el día. Durante la noche apenas duerme del dolor", ha dicho este lunes su compañero Sergi Ferré. "Además, a ella le gustaría ir a la playa (como llaman en el programa al espacio para fumadores) y eso la tiene muy nerviosa”. Belén Esteban no ha superado su adicción al tabaco. Es una de las colaboradoras de ‘Sálvame’ que más fuma. Y lógicamente, en un hospital no se puede fumar. Nunca ha estado tantos días sin fumar. ¿Será el momento de dejar este vicio?

Belén Esteban fumando
Belén Esteban fumando

Tal y como ha desvelado el reportero, Belén Esteban tiene la pierna conectada a una máquina para drenar la herida y evitar complicaciones. "Está hundida, muy desanimada, de hecho tiene el teléfono apagado y no habla con nadie ni contesta a nadie. En cuanto me ha visto se ha puesto a llorar. Lo peor es que aún le quedan otros diez días en el hospital, por lo menos", ha anunciado.