Nuevos problemas para Kiko Matamoros. Su ex, Makoke, ha contraatacado. El colaborador está harto de la madre de Anita Matamoros y la sombra de ésta le persigue. Después de unos meses en silencio, alejada de la pequeña pantalla, la colaboradora ha encendido de nuevo la guerra contra el padre de su hija en ‘Fiesta’. La azafata llegó el pasado sábado al programa de Emma García con las ganas de contar toda la verdad sobre una serie de acontecimientos que vivió junto a su exmarido.

Estas nuevas declaraciones surgen a raíz del último polideluxe de Kiko Matamoros. "No he querido contarlo hasta ahora porque estaba judicializado. ¿Por qué lo cuento ahora? Porque estoy harta de que se me calumnie, de que se digan cosas inciertas de mí", ha asegurado la que fuese azafata del ‘Telecupón'.

Kiko Matamoros MEDIASET
Kiko Matamoros MEDIASET

"Este verano se han dicho cosas que no son verdad. Me han invitado a entrevistas y a exclusivas, pero no he querido lucrarme de vender esta mierda. Porque es una mierda. Simplemente, me quiero defender, ya no puedo más. El otro día, cuando vi que Jorge Javier Vázquez insinuó cosas sobre mi persona [entre otras, ser acusada de manipular a la hija que tiene en común con Matamoros, Anita], ya no me quedaba más remedio. Hace un mes, en un 'Sálvame sandía', también hablaron de mi economía", ha afirmado la colaboradora.

Makoke recibió amenazas por parte de una persona en común 

Además, también se ha pronunciado sobre los compañeros de Kiko Matamoros en ‘Sálvame’. Asegura que a ella ninguno la llamó “para cotejar la información”. Hace unos días los abogados de la tertuliana le dieron luz verde para contar este episodio en televisión. Según Emma García, la madre de Anita Matamoros sería como una “colaboradora protagonista” en este asunto.

Makoke
Makoke

Makoke desvela que una persona que ella y Kiko tienen en común le ha estado enviando mensajes en tono amenazante. Tanto ella como su compañera Marisa Martín Blázquez han leído los mensajes aunque no han podido desvelar el contenido de los mismos. "Esa persona vino a mi casa. Lo que yo no sabía era que estaba a favor de Kiko y que me estaba grabando", ha explicado la empresaria.

La colaboradora estaba muy asustada, le “temblaron las piernas”, ya que también amenazaron a su hijo. "Mi obligación como mujer y como madre era ponerlo en manos de la Guardia Civil". "La cosa paró cuando denuncié", ha comentado la exnovia de Tony Spina.