La separación entre la princesa Charlene y el príncipe Alberto II de Mónaco es todo un hecho. Después de meses de rumores y ausencias por parte de la princesa, fuentes cercanas a la familia Grimaldi han afirmado que la relación entre ellos está completamente rota, pero que seguirán estando casados legalmente para “mantener las apariencias” y para que la princesa no pierda completamente la custodia de sus dos hijos.

Sin embargo, Charlene ha decidido negociar su “libertad sentimental” a cambio de una gran cifra de dinero y un acuerdo que involucra a un hombre que no es del agrado del príncipe Alberto. Según ha informado el medio francés “Voici”, la princesa logró llegar a un acuerdo con su marido al hacerlo firmar un contrato confidencial para seguir representando al Principado de Mónaco en público, tal como lo hizo hace algunos días en el torneo de rugby Saint Devote y en días anteriores en el Campeonato mundial de la Fórmula E de la FIA.

Según se ha filtrado, el príncipe Alberto II tendrá que pagarle 12 millones de euros al año para que ella siga presentándose como su esposa en los eventos públicos que así lo requieran, además de otorgarle la nacionalidad monegasca a Gareth Wittstock, el hermano menor de Charlène. Con la nueva nacionalidad de su hermano, él podrá convertirse en su apoyo incondicional en el Principado, acompañándola en todo momento en el Palacio.

Gareth Wittstock
Gareth Wittstock

Desde el 2018, el hermano de la princesa Charlène se trasladó nuevamente a Mónaco para estar más cerca de su hermana y de sus sobrinos, Gabriella y Jacques, dado que en ese año se había separado de su pareja y madre de su hija, la exbailarina Roisin Gavin. Además, la princesa se encontraba atravesando un muy mal momento debido a todos los rumores de separación que se habían filtrado en diversos medios de comunicación de talla internacional.

Aunque Gareth Wittstock no ha ejercido ningún cargo importante en el Principado de Mónaco, sí es una personalidad muy conocida en la vida social del Palacio Grimaldi, dado que ha acompañado a su hermana y a su cuñado en varios eventos oficiales de la Casa Real monegasca. Debido a sus constantes apariciones en la escena política del Principado, varias personas se han referido a él como “el Conde de Mónaco”, un título ficticio, pero que no le resulta molesto al cuñado de Alberto II. Gareth es Ingeniero informático y al igual que su hermana nació en Zimbabue, un país en el sur de África, pero toda su infancia y adolescencia la vivió en Sudáfrica. Después de que hermana se casa con el príncipe de Mónaco, Gareth decidió mudarse al principado para estar junto a ella y fue en ese momento donde conoció a la exbailarina irlandesa Roisin Gavin, con quien tuvo una hija llamada Kaia-Rose.

Según la revista “Paris Match” Gareth invirtió en una sucursal de Starbucks dentro del Principado, pero actualmente ocupa el cargo de secretario general de la “Princess Charlène of Monaco Foundation", una organización sin fines de lucro que se dedica a mejorar la vida de los niños que estén bajo condiciones desfavorables.