El pasado miércoles Letizia acudió a la entrega de despachos en Marín, una cita tradicional de todos los años, pero en esta ocasión con un motivo más especial. Leonor formaba parte de los alumnos presentes, aunque en su caso no recibiría ningún despacho porque lo hará cuando se gradúen sus compañeros guardiamarinas que han viajado con ella en Elcano. No obstante, Felipe VI le entregó la Gran Cruz al Mérito Naval con distintivo blanco por su esfuerzo. Sin duda esta ha sido la formación militar más dura hasta el momento.
Muchos de sus compañeros y familiares de ellos no están de acuerdo con este reconocimiento porque ellos han hecho mucho más esfuerzo y méritos que Leonor. Según fuentes cercanas, aunque Felipe VI y Letizia querían que no se hiciese ninguna distinción con la princesa, ha tenido un trato de favor por parte de los comandantes. Veían que no estaba al nivel de sus compañeros y que en su caso esto no iba a ser una formación laboral. Solo es un mero trámite como futura reina de España. Necesita las tres máxima condecoraciones de los tres ejércitos, tierra, mar y aire.
La princesa acababa agotada, y finalmente se decidió que solo acudiese a clase teórica. No realizaba las maniobras. Solo se la veía realizando estas prácticas cuando Casa Real pedía algún vídeo o fotografía de ese momento. Leonor viajó con sus compañeros durante cinco meses, las últimas semanas no les acompañó porque se formó en la fragata Blas de Lezo, donde también destacaron su baja forma física.
Leonor ha engordado varios kilos durante su viaje en el buque escuela
Leonor ha regresado de su formación militar con evidentes problemas físicos. Su madre está muy enfadada porque no la ve en forma. Ni tan siquiera está tonificada. Sabe que durante su estancia en el buque escuela ha comido muy mal, todo comida rápida. Hamburguesas, perritos calientes, y precocinados. Los reyes han decidido que durante este mes de verano haga un intensivo de ejercicio con un entrenador personal. Debe recuperar una buena condición física para enfrentar al ejército de aire, no quieren que vuelva a tener críticas.
En Zarzuela, desde luego, comerá mucho mejor. “Va a estar bajo vigilancia todo el verano”, explican fuentes de palacio. Incluso cuando se escape unos días con sus amigos de vacaciones. También se le va a intentar quitar uno de sus mayores vicios, los cigarros electrónicos. Letizia está muy enfadada con ella, no ha seguido ninguna de las normas de casa. Por eso quiere que acabe ya la formación militar y se instale en palacio, ya que ella tendrá que vivir en Zarzuela y estudiar en una universidad de Madrid.