Cuando Pedro Sánchez se reúna con la canciller alemana Angela Merkel le tendría que preguntar de dónde viene esta obsesión que tienen los medios de su país por informar sobre la vida de la monarquía española. Quizás el volumen de alemanes en Mallorca, tierra relacionada desde hace tiempo con los reyes, tiene algo que ver. O quizás es que al no tener Corona tienen curiosidad por la de aquí. El caso es que regularmente van apareciendo informaciones, antes sobre los reyes eméritos, ahora sobre Felipe y Letizia.

felip merkel

Efe

El 23 de abril de este año, en lugar de un libro y una rosa, la revista alemana Neue post regaló a sus lectores una información sobre el "divorcio inminente" de los reyes de España. Felipe y Letizia fueron portada bajo el demoledor título de "Cambio y corto", y se preguntaba por qué el rey no había acabado ya con la farsa y con el matrimonio.

portada neue tabla|puesto leticia

Neue Post

La revista está dedicada a la crónica social europea, con especial atención a lo que pasa en España. Pero la distancia y el sensacionalismo de la publicación hacen que se tenga que poner lo que se dice en cuarentena. Vete a saber hasta dónde llegan los tentáculos de Neue Post, pero el caso es que lo que hace unos meses era un divorcio inminente, ahora podría transformarse en un miembro más en la familia real. La revista especula con que Leonor y Sofía tendrán un hermanito/a. Vaya, que Letizia vuelve a estar embarazada a sus 45 años, desvaneciendo de golpe la crisis en su matrimonio con Felipe. En su último número, titulan: "¡Un bebé! A sus 45 años, la reina española está más feliz que nunca".

portada revista alemana felip leticia embarazada

Neue Post

También en portada, explican "cómo ella ha dominado su crisis matrimonial", señalando en páginas interiores que la reina se encuentra en un gran momento personal y que ya ha aprendido a caminar con paso firme por la monarquía española, tomándose las críticas con más tranquilidad. Curiosamente, cuando en España vuelven a aparecer a escena rumores de crisis, con la escena del paraguas en Girona, en Alemania les vaticinan una nueva época de felicidad con un nuevo discípulo.