Leonor se siente muy orgullosa de Felipe VI y continúa sus pasos. Sabe muy bien cuál es su deber y ha sido formada desde pequeña para ello. Aunque sus padres han intentado que tenga una vida más o menos normal, como el resto de chicas de su edad, la realidad es muy distinta. Ella será la futura heredera al trono cuando el monarca abdique o fallezca. Tiene una gran responsabilidad. Dirigirá todo un país. A día de hoy se prepara para ello. El pasado lunes 1 de septiembre inició su último año de formación militar, en esta ocasión con el ejército del aire. Una vez finalizado este curso ya tendrá las tres máximas condecoraciones y recibirá el máximo rango de las Fuerzas Armadas, será la primera vez que una mujer ostente ese título. La princesa ha entrada en la Escuela del Aire de San Javier como alférez con los alumnos de cuarto curso, y saldrá convertida en teniente.

Leonor en la Escuela del Aire
Leonor en la Escuela del Aire

La princesa tiene grandes parecidos con Felipe VI, y es que padece su misma enfermedad. El monarca ha mostrado en ocasiones las manos vendadas o con heridas en los bordes de las uñas, y es que el rey tiene la manía de morderse las uñas hasta el punto de destrozárselas y que quede poco estético. Un hábito que le comenzó en la infancia y continúa en la madurez. Es probable que este gesto inconsciente muchas veces lo haga en situaciones de máximo estrés. Es un hábito demasiado común entre la población, y disgusta a Letizia porque es poco estético.

Leonor no padece onicofagia, por lo menos no lo parece a simple vista, pero es cierto que padece la otra enfermedad del monarca. Se trata de la narcolepsia. Felipe VI ha tenido que ponerse en manos de especialistas para superar este síndrome, y es que no podía permitir quedarse dormido en cualquier acto institucional, como le ha sucedido en alguna ocasión. El marido de Letizia tuvo muchos problemas en su adolescencia, durante su formación, porque se quedaba dormido en las clases, rendía muy poco. Es algo que le sucede a su hija mayor.

Leonor padece narcolepsia y se queda dormida en clase 

"Felipe con dieciséis años era un niño mal criado, flojo en sus estudios, con faltas de asistencia y puntualidad en sus obligaciones escolares, déspota y con un gran problema añadido: el sueño. Estaba pasando una mala racha, un mal momento, quizá como consecuencia de su crecimiento, de su pubertad, lo que provocaba cierta vagancia, somnolencia y falta de interés en general. Se quedaba dormido hasta de pie. Sobre las siete y media de la mañana, la primera labor era despertarle de su habitualmente pesado sueño con toda clase de artimañas. Si le impartían clases sentado, Felipe se dormía. De modo que recomendó asistiera a las clases de pie, aunque sin apoyarse, porque, de lo contrario, también se dormía. Me extraña que el equipo médico de la Casa Real no se ocupara de estos episodios del sueño, que podría deberse a un trastorno llamado narcolepsia, un sueño sin previo aviso que suele manifestarse, estés donde estés y en cualquier lugar", comentó Peñafiel.

La narcolepsia es una condición crónica que provoca períodos de somnolencia diurna extrema y episodios súbitos de sueño profundo. No tiene cura, pero existen tratamientos para paliar sus síntomas. Monarquía Confidencial ya adelantó que en algunas ocasiones Leonor ha recibido una amonestación por quedarse dormida en clase.

Felipe se duerme
Felipe se duerme