Los famosos han encontrado otra fuente de ingresos. El trabajo del actor no es fácil. Hay muchos intérpretes, pero no todos consiguen vivir de ello. Los que no han tenido la suerte de trabajar en cine, teatro o televisión no les cuesta probar otros oficios. Sin embargo, los que tuvieron su momento de fama y ahora se encuentran sin llamadas, se resisten. Para mantener su popularidad y éxito se encuentran las redes sociales. Un lugar donde los rostros más conocidas de la pequeña pantalla se comunican con sus fieles seguidores. Entre fotografía y vídeo más personal o profesional, siempre aparece alguna publicidad, como si uno estuviese viendo una serie de televisión. Algunos perfiles han sido denunciados y criticados por los usuarios porque las publicidades son constantes. De hecho, parece más un perfil comercial que personal.
Hay famosos que facturan miles de euros por cada publicación, como Tamara Falcó, Georgina Rodríguez, Jordi Cruz, entre muchos otros. Se trata de publicidad encubierta que hasta la fecha no ha sido regulada. La hija de Isabel Preysler es una de las famosas que se considera influencer y aparece en el último informe de la Asociación de Usuarios de la Comunicación. Pero no es la única famosa que aparece en su listado de señalados que sacan rédito de sus cuentas de manera incorrecta, por no decir ilegal.
“#publi Si quieres desconectar en la cama y dormir con un sueño reparador, para levantarte al día siguiente fresca como una rosa, prueba DormiNatur”, escribe la presentadora Sandra Barneda, que publicita melatonina sin ambages.
"Si queréis saber más por curiosidad o lo que sea preguntadme en comentarios que os iré leyendo... Yo en unos días vuelvo a Tenerife a que él @drblasgarcia me quite la férula, os tendré actualizadídimos”, escribe sin adornos la influencer Paula Gonu a sus casi dos millones de seguidores.
Los famosos podrían enfrentarse a penas de hasta 1,5 millones de euros
Álex González, Iker Casillas, Paula Echevarría, Nieves Álvarez, Patricia Conde, Jordi Cruz y Carlota Corredera son algunos de los nombres vinculados a esta práctica cuestionable, ya sea desde una perspectiva ética o legal, en sus propios canales de comunicación. Estas personalidades públicas se encuentran en una posición de "inmunidad y privilegio" en comparación con otros medios más tradicionales, como la radio y la televisión, dado que parecen no cumplir con las normativas publicitarias destinadas a garantizar una protección efectiva de los derechos de los consumidores y usuarios, incluidos los menores de edad.
Cada vez son más los famosos que se aprovechan de Instagram y se hacen de oro con sus publicaciones. Cuantos más seguidores y likes, y más popularidad, más dinero. Algunos se cubren en salud poniendo #ad o #publi al final, cuando debería ser al principio.
Perales confirma que la entidad que lidera tiene como objetivo, a través de este análisis, destacar la problemática de la publicidad engañosa. La AUC tiene la intención de presentar denuncias administrativas y quejas éticas contra ciertos involucrados en este estudio. Estos actores podrían enfrentarse a sanciones que oscilan entre los 10.000 euros y el millón y medio, según su facturación publicitaria, de acuerdo con lo establecido en la Ley General de Comunicación Audiovisual.