Los jóvenes y las nuevas tecnologías van de la mano. Se trata del público mayoritario de las últimas novedades, pero también un target difícil para la industria literaria, que ve como el hábito de la lectura está cada vez más enfocado a la inmediatez y fugacidad de internet, y no a las historias de los libros. En este panorama emergen proyectos que buscan rescatar a ese público ajeno a la lectura y les ofrecen historias contadas mediante las herramientas más consumidas en la actualidad.

Entre estas propuestas destaca la aplicación para smartphones llamada Hooked, que significa ‘enganchado’, y que ha conseguido casi 9 millones de descargas a nivel mundial. Se trata de una app que trata precisamente de enganchar a la lectura a esa generación pegada a la pantalla de su dispositivo a través de historias breves explicadas en el formato de un chat al estilo WhatsApp. La idea es que los protagonistas de dichos relatos interactúen entre sí mediante este sistema, creando una sensación de amenidad y rapidez.

“Nos encanta leer, al igual que a ti, pero sabemos que puede ser aburrido si las historias son muy largas. Por eso creamos esta app para que leer sea rápido, aterrador y divertido”, se describe a sí misma Hooked en la tienda de iTunes. De este modo, la aplicación pretende llamar la atención de aquellos que no están dispuestos a devorar cientos de páginas, pero sí a estar pendientes de aplicaciones de mensajería.

Dentro de Hooked se pueden encontrar distintos géneros (amor, drama, terror, misterio, thriller, paranormal, comedia, fantasía y ciencia-ficción) y, una vez dentro de una historia, el usuario podrá avanzar a través del relato con simples ‘clicks’, en el que se irá actualizando la conversación de chat de los personajes.

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Además, la app ofrece a aquellos lectores más creativos y que disfrutan haciendo contenido propio la posibilidad de crear sus propias historias. Sin duda, se trata de una opción que se inspira en páginas web como Wattpad, donde los amantes de la escritura pueden publicar sus propias obras y compartirlas con toda una comunidad de lectores. En este aspecto, Hooked propone también poder escribir historias con más personas: “elige un punto de partida, crea tu personaje e invita a tus amigos a jugar contigo. Es como una improvisación en forma de chat”.

Modelo ‘freemium’

El modelo de negocio del que vive Hooked es el llamado ‘freemium’; con el que otras apps se rentabilizan, especialmente juegos. Se trata de un sistema que permite al usuario utilizar la aplicación de forma totalmente gratuita, pudiendo avanzar en la lectura durante un tiempo, pero llegado a cierto punto de la historia la aplicación obliga al lector a detenerse y a esperar 45 minutos para poder seguir. En este momento existen dos opciones: esperar a que pase ese tiempo y proseguir, o suscribirse por 2,99 euros a la semana, 7,99 al mes o 39,99 al año para no sufrir ningún tipo de limitación.

Otras apps del estilo

Tras el éxito de Hooked, la app Hoot trata de imitar el formato de SnapChat para ofrecer historias cortas pero con giros narrativos. El plan es que el lector se convierta en el espectador de una conversación de chat privada y lo haga mediante un sistema de suscripción.

Rapids de Amazon está más enfocada al público infantil y adolescente, pero también funciona utilizando el mismo sistema de aplicación de mensajería. Sus relatos están catalogados en diversos géneros y su propuesta es convertir grandes clásicos de la literatura en historias en dicho formato digital.

Por otro lado, Adela es otra app que juega con este sistema de chat, pero con un contacto más personal con el lector. La historia comienza con un número desconocido que manda un WhatsApp al usuario. Se trata de Adela, quien acaba de sufrir un accidente de tráfico y pide ayuda al lector. Es un relato que se desarrolla en tiempo real y que ofrece una experiencia realista.