La empresa automovilística Ford ha detallado esta semana que retirará su propuesta con el fin de construir una nueva planta de producción en México, lo que tenía que suponer una inversión total de 1.600 millones de dólares.

Aunque fuentes de la empresa desvinculan esta decisión con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, lo cierto es que esta decisión ha llegado justo después de la amenaza del republicano de imponer medidas arancelarias a las importaciones de los productos hechos en México.

Según varios medios americanos, Ford tiene previsto ahora hacer en su lugar una inversión de 700 millones en Michigan donde actualmente ya tiene una fábrica. La intención de la empresa es expandirse a los Estados Unidos en vez de abrirse a México, lugar que había escogido para tener un coste de fabricación menor.

"Nos animaron las políticas a favor del crecimiento que el presidente electo, Donald Trump, y el nuevo Congreso han indicado que seguirán", dijo el presidente y director ejecutivo de Ford, Mark Fields, en rueda de prensa.

Fields también ha añadido sobre la decisión que "estas reformas reguladoras y fiscales son importantes para aumentar la competitividad de los Estados Unidos, ver el resurgimiento de la manufactura norteamericana y la innovación tecnológica".

Durante la campaña electoral, Trump acusó a Ford, de despedir a miles de trabajadores en los Estados Unidos para desplazarse a México.

¡Hacedlo en EE.UU.!

La polémica recae en un tuit de Donald Trump y que podría haber influido en la decisión final de Ford, aunque la empresa lo desmiente. El presidente electo de los Estados Unidos ha tuiteado un mensaje criticando a General Motors y ha pedido que se hicieran los modelos de Chevy Cruze en los Estados Unidos.

Medios americanos han informado de que la multinacional salió a defenderse en un comunicado claramente a la defensiva: "Todos los Chevrolet Cruze Sedan en venta en Estados Unidos son producidos en la planta de montaje de GM en Lordstrom, Ohio. GM produce el Chevrolet Cruze de cinco puertas para mercados globales en México y un pequeño número es vendido en Estados Unidos".

Comparecencia pública el 11 de enero

El presidente electo de los Estados Unidos comparecerá en rueda de prensa este próximo miércoles día 11 de enero, 9 días antes de tomar posesión y sustituir a Barack Obama al frente de la Casa Blanca. Trump no hacía una rueda de prensa desde el pasado julio.

Esta decisión llega después de un enfrentamiento abierto entre el partido republicano y el presidente electo con el fin de anular el Comité Independiente de Vigilancia de la Cámara Baja, órgano que hace acusaciones de mala conducta contra los legisladores y su personal. "Con la cantidad de trabajo que tiene el Congreso, ¿realmente tienen que debilitar al Comité Independiente de Vigilancia, por injusto que sea?", tuiteó Trump. "¡Centraos en la reforma tributaria, la asistencia sanitaria y tantas otras cosas que son mucho más importantes!".

Injerencias políticas de Rusia

El presidente electo también ha cargado duramente contra las agencias de inteligencia americanas que buscan determinar hasta qué punto Rusia ha podido influir en la campaña electoral norteamericana y que comportó la victoria electoral de Trump.

Trump ha asegurado con ironía en un tuit que el informe sobre esta cuestión se pospondrá hasta el viernes.