Este año único para los mercados -el peor de la historia por la caída de los bonos y de la bolsa- termina sin apenas referencias y con cuatro sesiones hábiles, al ser festivo en las principales plazas del mundo por la Navidad. La bolsa española también cierra sus puertas, siguiendo siempre el calendario de las plazas europeas, aunque con la particularidad de que no celebra ninguna fiesta propia a lo largo del año. 

El miércoles se espera el dato de la evolución de las viviendas en Estados Unidos, una referencia que habla de la pujanza del consumo y del efecto que sobre los ciudadanos de las subidas de los tipos de interés. Actualmente, los tipos hipotecarios a largo plazo en la principal economía del mundo se sitúan en el 6,51% y ya es un nivel suficientemente alto como para frenar los precios y la demanda de la vivienda. En España, el dato más importante se publicará el viernes día 30 donde se conocerá el IPC adelantado correspondiente a diciembre con una previsión del 6,3% frente al dato de noviembre del 6,8%. Sin duda, el buen comportamiento de los precios energéticos explica esa expectativa de los analistas de menor crecimiento de inflación. Un dato muy a tener en cuenta, dado que numerosas referencias de productos y servicios se indizan al resultado final de este IPC, salvo en la subida de las pensiones que se actualizarán de acuerdo con el conocido en noviembre. 

Pero esta semana también tiene una relevancia especial en el calendario de cada persona para planificar el pago de impuestos del próximo ejercicio. Este año de abundantes pérdidas puede ser interesante para vender activos y hacer aflorar la pérdida que pueda luego compensarse con ganancias. Del mismo modo, ganancias de otros ejercicios podrían también materializarse para compensarse con pérdidas de este

Esta semana tiene una relevancia especial en el calendario de cada persona para planificar el pago de impuestos del próximo ejercicio

También el ahorrador tendrá su última oportunidad para aportar dinero a un plan de pensiones por importe de 1.500 euros que podrá desgravarlos en la declaración del IRPF a presentar en mayo y junio del próximo ejercicio. Una desgravación que ha quedado sustancialmente disminuida tras la reforma el ministro de la Seguridad Social realizada hace dos años con el fin de potencias los planes de empleo. Lamentablemente, estos planes de empleo todavía no han visto la luz y al paso lento que ven es posible que termine la legislatura de este Gobierno el año próximo sin que se conozcan. Mientras, Hacienda consigue menos desgravaciones por estos planes de pensiones. Eso sí, a los más críticos con esta desgravación que llegaba hasta los 8.000 euros por persona y año, habría que recordarles que en el momento de cobrar la prestación ese dinero se incorporaba sin ninguna retención y exención a la renta del jubilado, lo que suponía más un diferimiento en el pago de impuestos que una clara ventaja fiscal. 

Últimos días, pues, para dejarlo todo preparado y planificado para el próximo año. Superada la frontera del año… ya será imposible.

En cuanto a los mercados, los analistas no esperan movimientos significativos, o sea, la semana será muy parecida a la tanda anterior con movimientos cortos de los índices en una tendencia lateral con sesgo a la baja. En estos días vivimos la paradoja -sobre todo en EEUU- que los buenos datos macroeconómicos que se van conociendo perjudican tanto a las acciones como a los bonos. La mejoría y fortaleza de esa economía implica mayor dureza por parte de la Reserva Federal estadounidense (Fed) y tipos más altos representan caídas de bonos y de acciones. Poco a poco el mercado irá desvaneciendo estas paradojas, a medida que avance el próximo año. Pero, de momento, lo malo cotiza como bueno y lo bueno como malo.