¿Necesitas un apoyo para mejorar tus intervenciones durante las reuniones de trabajo? Hoy te presentamos Poised, una plataforma de inteligencia artificial que ejerce de coach en tiempo real. ¿Cómo? Durante los encuentros virtuales, esta herramienta te va haciendo recomendaciones sobre la tuya forma hablar y una vez finalizada la reunión envía un informe privado con tus puntos fuertes y debilidades.
Los otros participantes no saben que se está utilizando. Según datos compartidos por la compañía, algunos usuarios han llegado a reducir hasta un 90% las interrupciones verbales y aumentar en un 65% su participación activa en reuniones.
Una de las grandes fortalezas de la aplicación es su compatibilidad con plataformas de comunicación tan extendidas como Zoom, Google Meet, Microsoft Teams o Slack. También se puede descargar tanto para Mac como para Windows, si bien todavía no dispone de una versión móvil.
Como toda herramienta emergente, Poised tiene sus limitaciones. Algunos usuarios apuntan que la retroalimentación en tiempo real puede resultar distractora al principio. Otros critican que las funcionalidades más potentes solo están disponibles en planes de pago. Además, el software se centra exclusivamente en la comunicación oral y deja de lado elementos no verbales como el lenguaje corporal o el contacto visual, que a menudo son determinantes en una presentación.
A pesar de estos puntos débiles, Poised ha despertado un fuerte interés en perfiles profesionales diversos: desde directivos y product managers hasta vendedores o candidatos que preparan entrevistas laborales. En un momento en que la capacidad de comunicar bien a través de una pantalla puede marcar la diferencia, la aplicación posiciona como una aliada interesante para entrenar y perfeccionar una de las competencias más valoradas al mercado laboral: la comunicación efectiva.
En los últimos años, y especialmente a raíz de la pandemia de la COVID-19, las reuniones virtuales se han consolidado como una pieza clave en el funcionamiento de las empresas. El mercado de las plataformas de videoconferencia y colaboración en línea ha crecido de manera exponencial, convirtiéndose en un sector con un fuerte peso económico y una gran capacidad de innovación.
El impacto económico se manifiesta en varios niveles. Por una parte, empresas como Zoom, Microsoft Teams o Google Meet han pasado de ser herramientas complementarias a constituir una infraestructura esencial para millones de profesionales. Estas plataformas no solo generan ingresos directos a través de suscripciones, sino que también alimentan ecosistemas más amplios de servicios vinculados, como el cloud computing, la ciberseguridad o la integración con aplicaciones de productividad.
Por otra parte, la generalización de las reuniones virtuales ha transformado los costes operativos de las organizaciones. Muchas empresas han reducido los gastos en viajes corporativos, alquiler de espacios físicos y logística, mientras que han redirigido la inversión hacia la digitalización y la mejora de la conectividad. Eso ha generado nuevas oportunidades de negocio para proveedores tecnológicos y ha redefinido la manera cómo se distribuyen los presupuestos corporativos.
Finalmente, el negocio de las reuniones virtuales no solo se limita al ámbito empresarial tradicional. También han emergido modelos híbridos en sectores como la educación, la salud o la formación profesional, ampliando todavía más el alcance económico de este mercado.
En este contexto, la competencia entre plataformas impulsa una carrera para ofrecer funcionalidades innovadoras, como la inteligencia artificial aplicada a la toma de apuntes, la traducción automática o la gestión de proyectos integrados. En resumen, las reuniones virtuales han pasado de ser una solución temporal a convertirse en un motor económico en sí mismas, generando un negocio global que continúa en expansión y que redefine la manera como entendemos el trabajo y la colaboración.