El dato puede parecer exagerado, pero en esta línea van todos los analíticos de algoritmos actuales. Así pues, de repente, escribir guiones de películas o redactar contratos de arrendamiento se ha vuelto mucho más fácil, e identificar al verdadero autor de obras artísticas, académicas o periodísticas mucho más difícil. Pero esta historia todavía está en sus primeros capítulos. Según el último observatorio de Europol Innovation Lab el año 2025, se espera que el 90% del contenido disponible en Internet se produzca con la ayuda de la inteligencia artificial. Un estudio de McKinsey muestra que la adopción de la IA se ha más que duplicado en los últimos 5 años. El Financial Times también informó de que las inversiones en IA generativa superaron los 2.000 millones de dólares el año pasado, destacando el interés claro y creciente de inversores y empresas en esta tecnologia[6]. Greg Brockman, uno de los cofundadores de OpenAI, también compartió un tuit anunciando el enorme impacto de la IA no solo en la economía, sino específicamente en el mercado laboral: "Esta tecnología ya puede hacer todo tipo de cosas que las empresas necesitan actualmente los humanos. hacer. Incluso si esta tecnología no se ocupa de todo tu trabajo, podría muy bien cambiarla".
Kevin Scott, director de tecnología de Microsoft, también cree que en el 2023 será el año más emocionante que haya visto la comunidad de IA. Estas son algunas de las razones principales por las cuales hace esta afirmación: Creatividad ilimitada: a medida que la IA generativa se hace más popular y accesible, más personas pueden utilizar la tecnología para expresarse creativamente en la música, las artes, la escritura, etc. Estas nuevas herramientas también democratizan el acceso a nuevas habilidades que antes dominaban profesionales especializados o personas con mucha experiencia en campos como el derecho, la medicina o la historia, entre muchos otros. Repasamos las más destacadas.
Aspectos que lo cambian todo
Por una parte, la ayuda al trabajo: ¿con qué frecuencia hemos necesitado apoyo en tareas repetitivas, que requieren tiempo, complejas o auxiliares, para centrarnos en actividades realmente estratégicas y valiosas en nuestro papel? La IA se encarga ahora de esta misión, permitiendo que los humanos se alejen gradualmente de todo tipo de trabajo que no los dignifica ni los cumple. Innovación de alta velocidad: la IA generativa reduce significativamente el tiempo de los procesos creativos entre la idea, la necesidad y la solución, el resultado final. Este ciclo de colaboración virtuoso da lugar a un salto cuántico en términos de innovación en todos los ámbitos que es difícil de conseguir mediante los métodos tradicionales.
Así pues, errar es humano, y la máquina también. Este método de IA extremadamente potente está, por descontado, sujeto a errores. Eso se debe al hecho de que los modelos de IA se construyen y se entrenan a partir de datos y algoritmos desarrollados originalmente por humanos, y cuando estos contienen errores o están incompletos, los resultados generados por las máquinas también pueden ser defectuosos. Además, los modelos de IA tampoco tienen (todavía) la capacidad de entender el contexto o los matices del lenguaje humano, por ejemplo. Por lo tanto, pueden surgir respuestas inadecuadas, incorrectas o incluso ofensivas, de aquí la necesidad de la intervención humana para validar los resultados, de acuerdo con los parámetros de la legislación vigente, exactitud, veracidad, idoneidad, ética, entre otros.
En último término, es básico entender la importancia de hacer buenas preguntas y validar que obtenemos buenas respuestas. Hay un sesgo basado en los modelos de IA generativa pueden replicar los biaixos[8] presentes en los datos sobre los cuales fueron entrenados, dando lugar a contenido discriminatorio u ofensivo. Imágenes perturbadoras o surrealistas, como animales híbridos o cuerpos femeninos desvestidos, y textos homófobos o racistas son algunos ejemplos. La precisión es la causa de la falta de conocimientos, datos obsoletos o errores en la comprensión del contexto, estas aplicaciones se pueden utilizar para producir noticias falsas, vídeos deepfake y otros contenidos falso o inexactos. El contexto: los modelos de IA generativa pueden generar respuestas irrelevantes o inadecuadas, especialmente cuando se tratan preguntas complejas: las traducciones y las instrucciones de voz inexactas o humorísticas se producen a causa de errores en la comprensión del contexto, la falta de comprensión del lenguaje natural o la falta de conocimientos culturales. Y la imaginación: aunque estos modelos pueden producir un contenido original sorprendente, todavía están limitados por la cantidad y la calidad de los datos sobre las cuales se formaron. Por lo tanto, muchos artistas no aprecian los poemas, las letras, la música o las obras de arte generadas por estas herramientas.
Por todo ello, se tienen que dar garantías. Por una parte con la regulación: identificar y definir la originalidad o la propiedad intelectual del contenido generado artificialment[9] y controlar la aplicación y el riesgo de desinformación son temas que se han debatido encarnizadamente en el ámbito de la IA. De la otra, con la seguridad: el uso generalizado de la IA generativa supone una serie de peligros asociados a la piratería, como fraude y robo de identidad, filtración de información confidencial, manipulación de datos en contextos económicos o gubernamentales.