Telefónica estudia la posibilidad de abandonar la bolsa de Nueva York y que sus acciones dejen de cotizar en el parqué estadounidense, un movimiento que responde a la intención de la compañía de simplificar su negocio, según adelanta VozPópuli y han confirmado a Europa Press fuentes del mercado.

La teleco desembarcó en la bolsa de Nueva York hace casi 40 años, el 12 de junio de 1987, cuando se convirtió en la primera empresa española en cotizar en Wall Street.

La admisión a cotización en Wall Street –el mayor mercado bursátil del mundo– se consideró un “hecho histórico dentro de Telefónica y en España. La negociación de 54 millones de títulos de la compañía supuso la mayor entrada de capital europeo en esta bolsa hasta la fecha”, según destacó la compañía en un comunicado de mediados del año pasado con motivo de su centenario.

En el caso de que finalmente Telefónica abandone la bolsa de Nueva York, la decisión se anunciaría a través de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y de la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés).

Además, la decisión se enmarcaría en la revisión estratégica que la compañía está realizando de su negocio impulsada por su presidente, Marc Murtra, y que se espera que se dé a conocer en el último trimestre de este año.

La salida de la bolsa de Nueva York buscaría simplificar el negocio de la compañía, que en los últimos meses se ha desprendido de sus filiales en Argentina, Perú, Colombia, Uruguay y Ecuador, una serie de ventas que buscan reducir su exposición en Hispanoamérica.

Con la reorganización de sus activos en Latinoamérica, cuando se contabilicen las ventas de sus filiales, Telefónica recortará su deuda financiera neta hasta los 26.000 millones de euros, lo que supone la mitad de lo que tenía en 2016.

El 30 de junio pasado, Telefónica cerró el semestre con una deuda financiera neta de 27.600 millones, un 5,5% menos que en la misma fecha del año pasado. En este primer semestre, la deuda ha subido en 448 millones, lastrada especialmente por la remuneración a los accionistas por valor de 1.020 millones.

En la presentación de resultados, a finales del pasado julio, Laura Abasolo, directora financiera del grupo y responsable de la unidad de Telefónica en Hispanoamérica, adelantó que "la deuda del operador se reducirá hasta los 26.000 millones tras las ventas de Telefónica en Ecuador, Uruguay y Colombia, y la adquisición del 50% de FiBrasil".

Telefónica ha ido desinvirtiendo en Hispanoamérica tras el plan estratégico que presentó en 2019 el entonces presidente, José María Alvarez-Pallete, mientras está reforzando los cuatro mercados principales del operador (España, Alemania, Reino Unido y Brasil). Todas estas transacciones del primer semestre representan aproximadamente 3.000 millones de euros en valor de la empresa.