El Consejo de Ministros ha dado luz verde a la opa del BBVA sobre el Sabadell con la condición de que no haya una fusión entre las dos entidades al menos durante tres años. Se trata de una condición adicional a los compromisos pactados entre el BBVA y la CNMC, y que se conocieron el pasado 30 de abril. Pero esta nueva condición hará que los números de la operación cambien y las sinergias sean ahora distintas, por ello, el banco catalán pide al bilbaíno que recalcule estas sinergias y las dé a conocer, porque es importante para los accionistas.

"En el caso de proseguir con la operación, BBVA deberá analizar y proporcionar información sobre el impacto de estas condiciones, tanto en las sinergias esperadas como en su capacidad de retribuir al accionista en el futuro. Dicha información es relevante para nuestros accionistas", señalan fuentes de la entidad, que además reiteran la confianza del Sabadell "en la solidez de nuestro proyecto en solitario y en su capacidad para generar valor para nuestros accionistas", sin necesidad de una fusión.

El BBVA había anunciado que la integración con el Sabadell le proporcionaría la capacidad de capturar unas sinergias estimadas en 850 millones de euros al año, al eliminar gastos en los que a día de hoy cada una de las dos entidades incurre por separado. BBVA estima que sería posible ahorrar en torno a 450 millones de euros anuales en costes de administración y tecnología, a los que habría que sumar un ahorro de 300 millones de euros de gastos de personal y 100 millones en costes de financiación.

El BBVA anunció también que la racionalización de la red de sucursales tras la fusión sería del 10% de la red conjunta de ambas entidades, es decir, unas 300 oficinas de las 870 que se encuentran en un radio inferior a 500 metros. Y no dio cifras de reducción de empleos, aunque se apuntaba a unos 2.000.

Pero el Gobierno le prohíbe ahora fusionarse durante tres años, que pueden llegar a cinco y hacer ajustes de personal y red de oficinas, según lo anunciado este martes. "Hemos acordado aprobar la operación con la condición de que en los próximos tres años BBVA y Sabadell mantengan la personalidad jurídica, los patrimonios separados y la gestión del día a día de forma autónoma, son condiciones de interés general y nos habilita la normativa", ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Carlos Cuerpo.

Por tanto, esas sinergias de 850 millones de euros anunciadas en mayo del 2024, cuando el BBVA lanzó la opa hostil al Sabadell, serán ahora menores. Y no solo por las condiciones del Gobierno español, también por las que ya pactó con la CNMC. Sin embargo, el banco debe darlas a conocer en el folleto de la opa que debe publicar próximamente la CNMV, de manera que será cuestión de días que el banco las haga públicas.