Las empresas del sector energético han hecho públicas sus cuentas de resultados y con ellas su aportación fiscal, a la que han añadido este año el nuevo impuesto temporal impulsado por el Gobierno para gravar los "beneficios caídos del cielo". En este sentido, Repsol, Cepsa y Naturgy son las compañías energéticas que más contribuirán a las arcas públicas este año por el nuevo tributo que gravar con un 1,2% las ventas de las empresas del sector, cuyos ingresos superen los 1.000 millones anuales.

En total, Repsol, Cepsa, Naturgy, Iberdrola y Endesa tendrán que pagar este año unos 1.483 millones de euros por el tributo, siendo las tres primeras las que más abonarán. Cabe destacar que las principales compañías se han alineado para recurrir el impuesto ante la Justicia, considerándolo "discriminatorio, injustificado y arbitrario". Tanto la patronal Aelec (berdrola, Endesa y EDP) como Endesa e Iberdrola y Repsol individualmente han decidido interponer recursos contencioso-administrativos ante la Audiencia Nacional, que ya rechazó las medidas cautelares solicitadas por la petrolera. 

Del total a abonar por las cinco empresas del sector, Repsol, Cepsa y Naturgy suman el 72,5%. Concretamente, la petrolera que preside Antonio Brufau tendrá que pagar este año en torno a 450 millones de euros, según precisó el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, en la conferencia con analistas para explicar los resultados de 2022. Imaz aseguró, no obstante, que dicho impuesto no tendrá un impacto "material" en las cuentas de 2023.

El directivo criticó este impuesto, al considerar que no es compatible ni con la Constitución Española ni con la normativa europea, por lo que la compañía lo ha llevado ante la Audiencia Nacional. "Estamos encantados de contribuir a la sociedad a través de los impuestos que pagamos, pero esta tasa es discriminatoria y desincentivará el negocio. Lo que necesitamos las empresas es más inversión y producción para mantener los precios energéticos bajos", defendió Imaz.

Cepsa pagará 325 millones y Naturgy 300

Por su parte, Cepsa pagará en 2023 aproximadamente 325 millones de euros. Este cargo, según precisa el grupo, no está reflejado en los resultados de 2022. La contribución fiscal total de Cepsa alcanzó los 6.654 millones de euros en 2022, cifra récord en la historia de la compañía, de los que el 71% (un total de 4.721 millones de euros) fueron impuestos pagados en España.

En cuanto a Naturgy pagará este año en torno a 300 millones de euros, según el presidente ejecutivo de la firma, Francisco Reynés, quien destacó que esa cifra ya está integrada en las previsiones de la compañía sobre el resultado bruto de explotación (Ebitda) para 2023, que la energética espera que sea "por lo menos igual" al de 2022, cuando ascendió a 4.954 millones de euros (+40,4% en términos interanuales).

Iberdrola calcula que este año pagará en torno a 200 millones de euros debido a este impuesto, que también ha recurrido ante los tribunales. "Consideramos que este impuesto incumple la Constitución Europea y el Derecho europeo y no esperamos que este año haya una decisión de los tribunales, probablemente el año que viene", indicaron desde la compañía.

De su lado, Endesa también está inmersa en la batalla judicial contra el impuesto y lo ha recurrido también ante la Audiencia Nacional por considerarlo "injustificado y discriminatorio". La compañía avanzó que los resultados de los años 2023 y 2024 se verán impactados tanto en ebitda (resultado bruto de explotación) como en resultado ordinario neto por la nueva tasa, con una afectación de 208 millones por año.

Hacienda ya ha recaudado 817,4 millones con el pago anticipado 

Al margen de la batalla judicial, la Agencia Tributaria ya ha recaudado 817,4 millones con el pago anticipado del impuesto temporal a energéticas, mientras que el importe obtenido por el tributo a entidades financieras superó los 637 millones de euros, que en conjunto suman 1.454 millones de euros para las arcas públicas. "Los resultados son muy positivos", destacó la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.

El pasado 20 de febrero finalizó el plazo tope para el pago anticipado de los impuestos, que se corresponde con la mitad de lo previsto para todo el año. Así, las entidades financieras y energéticas han tenido que ingresar, en concepto de pago anticipado de dicha prestación, el resultado de multiplicar el porcentaje del 50% sobre el importe de presentación calculado.

A la luz de estos primeros datos, la titular de Hacienda prevé que se superarán los 3.000 millones anuales --en 2023 y 2024-- inicialmente estimados sobre la recaudación de estos tributos temporales. Estos ingresos 'extra' buscarán cubrir los costes derivados de las medidas para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania.