La morosidad sube por segundo mes consecutivo hasta alcanzar en febrero el 3,62%, un 7% más que hace un año (cuando se situaba en el 3,55%) y su mayor nivel desde noviembre de 2022, según los datos publicados este lunes por el Banco de España. El supervisor revela que la ratio de dudosos de las entidades de crédito se sitúa ya en el 6,59%, mientras que, en las entidades de depósito (bancos, cajas y cooperativas) llega al 3,52%. En ambos casos es mayor que en un mes antes (enero), respecto a finales de 2023 y en comparación con un año antes.

Concretamente, las entidades españolas acumulaban a cierre de febrero 31.428 millones de saldo moroso (impagado) sobre un total de 1.166 billones que tienen concedidos a través de préstamos y créditos. Un año antes, en febrero de 2023, el saldo moroso era mayor, de 31.453 millones de euros, pero también lo era el saldo total que tenían concedido en créditos, que ascendía a 1.199 billones.

Los bancos han restado importancia a esta subida de la morosidad, precisamente, por la reducción de saldo. La subida de tipos de interés ha hecho que las empresas y familias demanden menos crédito, y a su vez, que amorticen deudas a un ritmo más elevado. Lo que ha provocado que el volumen total de sus carteras sea más pequeño y que el porcentaje total de impagos, sea más elevado.

De hecho, destacan que el sector financiero español ha logrado mantener estables los niveles de morosidad desde que en julio de 2022 comenzó la subida de tipos de interés en Europa. Si bien, las entidades de depósito redujeron los impagos hasta el 3,39% el pasado verano, tratándose de su mejor marca desde 2008. Aunque desde entonces ha ido subiendo ligeramente.

Según los datos del Banco de España, los bancos, cajas y cooperativas acumulaban a cierre de febrero 22.309 millones de impagos sobre un total de 1.115 billones. Un año antes eran 22.400 millones de créditos morosos sobre 1.149 billones de créditos en cartera. Lo que supone un aumento del 6% de la tasa de mora respecto a febrero de 2023, ya que ha pasado del 3,46% al 3,52%. 

En el caso de las entidades de crédito, la subida es mayor, de un 9% en doce meses. En febrero de este año eran 9.119 millones de créditos dudosos sobre un total de 42.742 millones prestados. Y doce meses atrás eran 9.053 sobre 42.835. Lo que hace que en el mismo tiempo la morosidad haya pasado del 6,04% al 6,59%. 

El Banco de España ya alertó de estas cifras hace solo unos días. En concreto, Mercedes Olano, la directora general de supervisión mencionó durante su intervención en un foro empresarial que "los altos tipos de interés que se aplican a algunos de los productos de consumo (de entidades reguladas y no reguladas) en ocasiones son considerados por los tribunales de justicia como usurarios", ya que son muy elevados, y a menudo, hay dificultades para devolver el crédito junto a los intereses.

"No hay duda de que los instrumentos de consumo son los más rentables, pero también son los que tienen más riesgo, siendo el sector más sensible a los cambios en el ciclo macroeconómico", añadía. En este sentido, advertía que la gestión del crédito al consumo "requiere de una vigilancia intensa y un control exhaustivo", ya que las condiciones económicas pueden cambiar con rapidez y los requisitos exigidos por las entidades para otorgar crédito deben adaptarse "con la máxima agilidad".