A caballo entre Lleida y Barcelona, la empresaria Laia Rogel ostenta la presidencia de la Asociación Profesional de Empresarias de Lleida y Pirineos, Ap!Lleida, y del Gremio de Publicidad, Comunicación y Marketing de Catalunya. Las dos entidades están de enhorabuena este año: celebra 20 años Ap!Lleida, y el centenario, el gremio. Con Rogel al frente, la asociación leridana se ha profesionalizado, y el gremio se ha feminizado porque la empresaria es la primera presidenta en cien años.

Sus respectivos mandatos han sido un punto de inflexión y una manera de "dejar huella y legado" de una empresaria que pide a las mujeres emprendedoras que "cuando crean y salen adelante sus proyectos no lo hagan pensando en qué estarán solo empresarias autónomas". "Tienen que ser más ambiciosas", explica en una entrevista a ON ECONOMIA. Reconoce que "la palabra ambiciosa cuando se utiliza para definir a una mujer todavía tiene una connotación no demasiado buena". Pero Laia Rogel lo defiende acérrimamente: "No nos tenemos que avergonzar de querer ser ambiciosas, ya que la ambición -sin excesos- es buena porque tiene la misión de hacernos crecer".

Rogel lo ha experimentado con su propia empresa, la agencia creativa La Pometa, que fundó en el 2012, una de las primeras agencias de marketing digital de la ciudad de Lleida. Después de ponerla en marcha "me di cuenta de que no había estudiado para ser empresaria, no tenía las herramientas ni los conocimientos para hacer crecer una empresa, e hice un MBA. Ahora, compagina sus responsabilidades al frente de un equipo de 12 profesionales con los dos sombreros 'institucionales' a los cuales también dedica mucho tiempo.

La patronal de empresarias de Lleida

Para Ap!Lleida, en el 2025, es "un año importante" en que harán "muchas actividades" que reforzarán la presencia y la importancia de una asociación de empresarias en Lleida, que agrupa a unas 140 empresarias y autónomas, con una representación muy transversales por sectores de actividad y dimensión de las empresas. "Ahora mismo todavía es necesario que ejerzamos como lobby para tener voz dentro del mundo empresarial y para ser escuchadas", se queja Rogel. Reclama más presencia femenina a las instituciones locales y de la demarcación de Lleida y, concretamente, al grupo de trabajo G10. Una alianza estratégica formada por instituciones públicas, empresas, sindicatos y centros de conocimiento del territorio, "donde la única representante femenina es la delegada del Gobierno".

El grupo de trabajo es muy importante para la toma de decisiones en beneficio del territorio y "nosotros no estamos". De hecho, Ap!Lleida solo está en la Cambra de Comerç de Lleida, como vocal consultivo, con voz pero sin voto. También están vinculadas a Foment del Treball y mantienen buena sintonía con Pimec Lleida, patronal a la cual están adheridas. La empresaria está convencida de que "aportaríamos mucho; una visión diferente y eso es positivo porque aquí está el valor: la diversidad, la diferenciación".

Como el resto de patronales, una de las preocupaciones que tienen es la política fiscal. En concreto, en Catalunya. "Tenemos más impuestos que el resto de comunidades autónomas", se lamenta la empresaria. La asociación deja en manos de las grandes patronales las reivindicaciones en temas como este, para centrarse más en consolidarse como el punto de encuentro femenino indispensable en la búsqueda de oportunidades profesionales, y un espacio principal desde donde mejorar y liderar el conjunto del tejido empresarial leridano.

Preguntada sobre la asociación, Rogel explica que acoge desde la pequeña autónoma, que necesita mucho el apoyo que de la red que encuentra dentro de la asociación, hasta la micro, pyme y gran empresa familiar -que es la que más frecuenta en Lleida cuando se habla de grandes empresas. Reflexiona sobre la incorporación de las nuevas generaciones en la empresa familiar, muchas de ellas lideradas por 'las hijas de', "que se han asociado a Ap!Lleida y que son jóvenes muy bien preparadas".

La presidencia de Ap!Lleida y del Gremio de Publicidad de Catalunya, Laia Rogel. Foto Montse Giralt
La presidencia de Ap!Lleida y del Gremio de Publicidad de Catalunya, Laia Rogel. Foto Montse Giralt

Un territorio rural y de empresa familiar

Es un espejo de la realidad del territorio, del cual destaca dos vertientes: el peso del sector primario, que hace que "hablemos de un territorio muy rural, donde el papel del hombre está todavía predominando,", y donde hay "mucha tradición de empresa familiar". Son empresas que, como paso también en la Catalunya central, tienen una "la manera de hacer basada al tener poca presencia pública, al difundir poco lo que hacen, muy cerrados... este es el perfil; su ADN".

Sobre este tema, cabe decir que Ap!Lleida celebró el año pasado la primera edición del Congreso de Intergeneracionalitat. Un espacio de encuentro donde se fomenta la interacción entre jóvenes y sénior, y se abordan temas tan cruciales como el futuro del trabajo, la diversidad generacional y el uso de la tecnología en las empresas. ¡Desde Ap!Lleida "queremos consolidar este tipo de encuentros, que nos permiten debatir cuestiones estratégicas para la sociedad".

"Si tienes un equipo que funciona motivado, la empresa es mucho más rentable", dice Rogel para explicar cuáles son los rasgos diferenciales de una gestión empresarial liderada por una mujer. "Somos más próximas, más abiertas, más empáticas con nuestros colaboradores", para no hablar de la sensibilidad para la conciliación familiar. Virtudes que no son obstáculo porque "estamos muy preparadas profesionalmente". "Son muy organizadas porque tenemos que dividir nuestro tiempo entre el trabajo y otras responsabilidades sociales y la familia", y eso solo se hace si hay un orden. También valora que "las profesionales quizás sabemos delegar más que los profesionales". "No tenemos tantos recelos a la hora de delegar responsabilidades; tenemos más confianza en los equipos", añade.

Mientras tanto, la empresaria admite que los tiempos van cambiando y que ahora es más fácil encontrar directivos con unas prioridades diferentes, "las nuevas generaciones son más accesibles... incluso en una reunión de trabajo puedes llegar a hablar de temas más personales; cosa que hace unos años no pasaba".

Un gremio 'masculinizado'

Esta masculinización es la que se encontró en junio del 2023, cuando asumió la presidencia del Gremio de Publicidad, Comunicación y Marketing de Catalunya. "Soy la primera presidenta en sus 100 años de historia", sonríe y "eso lo dice todo". En aquella fecha, Rogel advirtió a los asociados: "Quiero que el Gremio sea el ecosistema del mundo de la publicidad, abriéndose, siendo más diverso, inclusivo, actual y moderno". Lo dijo sabiendo, perfectamente, que es un sector donde la brecha de género es muy grande; especialmente en los cargos directivos.

"Entré en un gremio muy masculinizado", y ha cambiado la imagen, la página web... El año pasado impulsó una campaña en torno al 8M para dar visibilidad a las mujeres que están en el mundo de la publicidad. Con el apoyo de su junta ha abierto una cuota específica, más económica, para los autónomos. "Porque es un sector donde muchos profesionales son autónomos, están muy dispersos por el territorio y, quizás por ambas circunstancias, está junto de mujeres", certifica Rogel.

Hace un par de semanas, el gremio difundió el llamado Manifiesto 1926, una campaña por abrir los actos del centenario y con "el objetivo de seguir siendo un motor de cambio e innovación, adaptándonos a los nuevos tiempos y liderando el futuro del sector publicitario, de la comunicación y del marketing en Catalunya".

Hablante de centenarios... como presidenta de Ap!Lleida, Laia Rogel ha sido designada embajadora del centenario del club deportivo SE AEM Lleida, y de su equipo femenino, "un reconocimiento al papel fundamental de la asociación en la defensa de la igualdad de oportunidades y el empoderamiento de las mujeres en todos los ámbitos, incluyendo el deporte," valora Rogel. "Tenemos que dar visibilidad al papel de la mujer empresaria, pero también al de la mujer al deporte, porque nosotros estamos mal, pero es que ellas todavía lo tienen peor", concluye Rogel.