¿Qué tienen en común Extremadura, Leonardo Di Caprio y los diamantes? Por raro que parezca, y más allá de la conocida película 'Diamantes de Sangre', el actor estadounidense no solo ha puesto el ojo en España, sino que también el dinero. A través de la empresa Diamond Foundry, se encargará de poner en funcionamiento una fábrica de diamantes sintéticos en el municipio de Trujillo, situado en Cáceres.

Lo especial de estas gemas es que sirven de alternativa a los chips semiconductores, tan demandados en los últimos años y cuya escasez ha provocado problemas de producción en diferentes industrias como la del automóvil. De hecho, la aplicación de los diamantes sintéticos es espcialmente útil en el sector de los coches eléctricos, ya que hay componentes que se elaboran a través de ellos.

Este viernes ha tenido lugar un acto de presentación en el polígono industrial de Arroyo Caballo de Trujillo para exponer el proyecto al público. La fábrica comenzará su producción en 2025 y será la primera de este tipo en Europa. Así lo ha indicado su consejero delegado, Martin Roscheisen, tras el acto simbólico de colocación de la primera piedra que se ha celebrado hoy, con presencia del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y de la ministra de Política Territorial y portavoz del gobierno, Isabel Rodríguez, entre otras autoridades.

Inversión cercana a los 700 millones de euros

Diamond Foundry nación en 2012 en California y su aterrizaje en Europa pretende solventar uno de los grandes problemas de Europa en la fabricación de vehículos eléctricos, como son los semiconductores. La planta industrial aprovechará la producción de energía a precio competitivo que ofrece Extremadura, en este caso al conectarse a una planta fotovoltaica de 120 MW que construirá la empresa Powen. 

Para el desarrollo de la planta, que se ubicará en una parcela de unos 80.000 metros cuadrados, se invertirá cerca de 700 millones de euros y se espera generar más de 300 puestos de trabajo directos y otros 1.000 indirectos. De este modo, la firma estadounidense de Di Caprio ha desarrollado ocho generaciones de diseños de reactores de plasma, que son los aparatos que permiten generar las condiciones ambientales necesarias para la fabricación de los diamantes sintéticos.

Los reactores de plasma patentados y utilizados por Diamond Foundry permiten la creación de diamantes monocristalinos del tamaño de una oblea (SCD), cuyo rendimiento en conductividad térmica supera ampliamente a los chips de silicio. Por ello, pueden ser utilizados como semiconductores para las industrias de computación e inteligencia artificial, comunicaciones 5G/6G y automóviles eléctricos.

En su intervención, Roscheisen ha recordado que la planta, cuyas obras ya están en ejecución, es la más ecológica posible gracias a las últimas tecnologías, que, a su vez, permitirá vehículos eléctricos más eficientes. Se ha mostrado agradecido con la acogida y el apoyo "entusiasta y colaborativo" que el proyecto ha tenido en Extremadura, a la que ha calificado como "el lugar más apropiado" y que ha propiciado "una verdadera alianza".

Buena colaboración con la Administración 

En este mismo sentido se ha expresado el presidente de la compañía en España, Rafael Benjumea, que ha explicado que desde el primer momento que se eligió el lugar donde iba a ponerse en marcha el proyecto "se comenzó a funcionar como un equipo", lo que ha sido la base "del éxito" que se plasma en el acto de hoy.

Benjumea se ha congratulado de que Roscheisen haya creído desde el primer momento "en España, Extremadura y Trujillo" y de que esta apuesta haya contado con el respaldo institucional y económico. Por ello, ha considerado que es "un ejemplo magnífico" de colaboración y ha aprovechado para mandar un mensaje sobre el "gran potencial" de España y a no desaprovechar "la oportunidad histórica" de liderar la independencia energética.

En esta misma línea se ha expresado la portavoz del Gobierno, que ha aplaudido la actitud de Extremadura y de inversores de apostar por las energías renovables y por industrias sostenibles, y ha instado a "desprenderse de complejos" respecto al liderazgo energético de España.

A su juicio, iniciativas como la planta de diamantes sintéticos de Trujillo, no solo sitúan a Extremadura y España en ese liderazgo y oportunidad "que no se debe dejar pasar", sino que redunda en alcanzar un mejor nivel de vida para las personas que encuentran una oportunidad laboral en estos entornos. Ha recordado que la autonomía energética "es uno de los retos" de España, por lo que la colocación simbólica de esta primera piedra no lo es solo de este proyecto sino de una estrategia de futuro.

Por su parte, Fernández Vara ha agradecido a los inversores que hayan creído en Extremadura para que este proyecto sea una realidad, aunque ha añadido que "han tomado esta sabia decisión porque saben que es donde mejor les va a ir". "Ahora toca otro papel en la historia", ha remarcado el presidente de la Junta, que ha resaltado el lugar destacado que la región tendrá en el nuevo escenario.